Ya no disimula el sicariato mediático: ¡Todos contra López-Gatell
Si uno pone un poco de atención, podrá confirmar que el grupo periodístico opositor al gobierno del presidente López Obrador, está compuesto por personajes bastante entrados en años.
Hay muy poca sangre nueva en el sector de la prensa tradicional y la poca que llega, inmediatamente se contagia de los vicios y malos hábitos de quienes fungen como sus “maestros”.
En la conferencia mañanera de este día, el presidente señaló, en forma particular, a Pablo Hiriart y a Raymundo Riva Palacio, como dos ejemplos de lo que ha sido a lo largo de la historia reciente del país, el periodismo de corte neoliberal.
Estos dos personajes se han identificado siempre con la causa de los grupos conservadores. Sus carreras en el medio de la comunicación, están marcadas por los ataques sistemáticos a todo lo que amenace o se oponga a las políticas económicas neoliberales, dictadas desde las oficinas del gobierno norteamericano, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
Enemigos históricos de la propuesta de cambio abanderada por el hoy presidente López Obrador, se han dedicado durante toda su vida profesional, a atacar los intentos de transformación en el país y apoyar al mismo tiempo, las políticas entreguistas de los gobiernos prianistas.
El presidente señala que se hace necesario responder a diario a este tipo de comunicadores, para desmentir las noticias falsas que publican en los “medios sicarios” donde trabajan.
Aparte de los problemas que está viviendo en estos momentos nuestro país, a consecuencia de la pandemia de Covid-19, se debe enfrentar la epidemia de noticias falsas que intentan desprestigiar los esfuerzos del sector salud y del presidente de la república, para controlar la enfermedad y disminuir el nivel de contagio, paulatinamente.
Periodistas como Riva Palacio e Hiriart, intentan dificultar las acciones de gobierno, con fines meramente políticos. La salud de la gente pasa a segundo plano.
En las notas que circula El Financiero, medio en que escriben ambos comunicadores, se encuentran a diario descalificaciones a toda política de salud emprendida por el gobierno. Se habla de incompetencia, incapacidad y se pide la renuncia del subsecretario de salud Hugo López Gatell.
López Obrador invitó a los demás representantes de medios informativos asistentes a la conferencia mañanera, así como al público que sintoniza la emisión mañanera, a verificar que no pasa día sin que alguno de estos dos periodistas, critique desfavorablemente al gobierno del país, haciendo uso de datos falsos, o interpretaciones equívocas.
La tarea que tienen encomendada es desacreditar al presidente y al gobierno de la Cuarta Transformación. La finalidad, dijo López Obrador, es crear la idea de que la pandemia en lugar de ceder, crece sin control alguno.
La salud de los mexicanos, importa poco en este momento a los periodistas conservadores. Lo que les interesa en realidad es el beneficio político que puedan sacar de la enfermedad, haciendo aparecer al actual gobierno como una estructura pública carente de idea, sin capacidad para resolver los problemas que enfrenta la nación y sin visión política para afrontar las dificultades económicas que acompañan a esta enfermedad.
Todo lo que escriben los periodistas conservadores en este momento, tiene que ver invariablemente con temas relacionados con la política nacional.
Las elecciones del 2021 son centro de atención de las fuerzas opositoras que intentan crear un frente común, para conseguir espacios de gobierno en las próximas elecciones.
López Obrador señaló hoy, que la petición para que sea removido del cargo el doctor Hugo López Gatell, obedece a esta intención política. Los conservadores no quieren que alguien capaz informe a diario a la sociedad mexicana, sobre la situación que vive nuestro país respecto a la pandemia.
Gatell no les permite que mientan. Gatell desenmascara de inmediato sus mentiras con datos científicos y cifras oficiales.
Los conservadores tienen aún esperanzas en que la pandemia no ceda tan fácilmente. Quieren que se mantenga un tiempo más. Así podrán seguir culpando al gobierno de no hacer lo suficiente para controlar el contagio.
En este aspecto, el presidente de la república también fue muy claro. “Se van a quedar con las ganas los conservadores, porque seguiremos informando a diario a la gente, sobre los avances en el combate a la enfermedad y sobre las medidas que se tomen para evitar los rebrotes”.
Hugo López Gatell se queda. Ha demostrado ser un gran profesional en cuestiones de salud y un comunicador excelente que sabe hacerse entender ante la gente.
Como dijimos al inicio, los comunicadores del bloque conservador, son en su mayoría personas de bastante edad. Utilizan los métodos que fueron aplaudidos por los gobernantes conservadores en el pasado. Es de dominio público que tanto Riva Palacio como Hiriart se encuentran en la lista de los periodistas que más favores recibieron de las administraciones neoliberales, vía publicidad oficial y “chayote”.
Están acostumbrados a escribir sus “análisis” y notas diarias, sobre pedido. Si la orden es atacar a diario al presidente, no se detienen en consideraciones de otra índole, al momento de redactar sus artículos. Un día sí y otro también, aparecerán críticas de todo tipo en contra de quien gobierna actualmente al país.
La mayor parte de las veces, sustentadas en información tendenciosa, datos falsos o filtraciones de personajes que solo ellos conocen.
Las conferencias mañaneras del presidentes López Obrador y las nocturnas que preside el doctor Gatell, sobre temas relacionados con la pandemia de Covid-19, son los referentes más confiables que tienen los mexicanos, para estar debidamente informados sobre lo que en realidad pasa en nuestro país.
Los medios de comunicación tradicionales están involucrados en el proceso electoral del próximo año. La intención de todos ellos es hacer que el gobierno se vea mal.
Piensan que así el voto ciudadano se inclinará por los candidatos del PRI, PAN, PRD o de “México Libre”, si de pura casualidad consigue el registro como partido político.
La vieja prensa se muere por edad natural. No hay periodismo joven dentro de sus filas. Los nuevos exponentes que se integran ocasionalmente al equipo, envejecen de inmediato por el contacto con quienes ejercen hasta hoy poco el periodismo servil y chayotero.
Es difícil que la mentira de esta vieja prensa prospere. Hay una sociedad despierta que está cansada de esos profesionales del engaño.
Pero es bueno que el presidente López Obrador los desenmascare en forma permanente. Que dé sus nombres y señale sus faltas.
Parte de la transformación que vive el país, tiene que ver con la recuperación de los valores, ética y moral de los mexicanos.
A los mentirosos, a los farsantes, a los serviles y reaccionarios, hay que gritarles sus verdades todo el tiempo.
Malthus Gamba