@AlamBeav
La periodista Manú Dornbierer publicó en 2006 su libro “PRIAN: un partido bicéfalo”, en donde derrumba el mito de que en el México del siglo XX y XXI nos gobernaron dos partidos, el PRI y el PAN.
Sin embargo, para la Premio Fernández de Lizardi 1981, desde el arribó de Carlos Salinas de Gortari en 1988, se creó el PRIAN.
Ese partido unido por las corrientes entreguistas y neoliberales del tricolor y del blanquiazul.
Y es que, Salinas logró que los tecnócratas se adueñaran del partido surgido de la Revolución y logró desterrar a los nacionalistas. Mientras que Fernández de Cevallos, sepultó los principios de Manuel Clouthier, para fusionar al PAN con el PRI.
Hoy, a dos años del arribó del primer gobierno social demócrata en México. El PRD que fue un partido surgido de los nacionalistas exiliados del PRI y de las distintas corrientes de la izquierda mexicana.
El ex guerrillero Zambrano, extasiado por las mieles del poder, prostituyó sus principios y ahora se suma a quienes hace unos años eran sus enemigos.
El único fin de estos partidos es intentar devolver al poder a quienes hoy yacen en el basurero de la historia. Quienes llevaron a millones a la pobreza, mientras se enriquecían, amparados en la impunidad.
El PRD por el cual cientos de militantes dieron su vida, en contra del fraude electoral del 6 de julio de 1988. Fecha que marcó el inició de la era neoliberal en México y con ella la destrucción de la nación.
En su intento desesperado por recuperar los privilegios perdidos, se han sumado los grandes enemigos de México y los mexicanos. Empresarios corruptos, organizaciones clientelares, organizaciones sindicales, periodistas, etc.
Esos quienes sus infamias en contra del país han sido expuestas, entendieron que sólo unidos podrían representar una “oposición” en contra de la 4ta transformación del país.
En dos años de gobierno, han hecho hasta lo imposible por detener el avance de la transformación. Imaginaron que los dichos del presidente López Obrador, sería solamente un eslogan publicitario.
Pero ahora que se encuentran al borde de su extinción, se aferran a desaparecer, se sostienen de lo poco que les queda e intentan comprar a los carentes de principios.
El PRIANRD se ha conformado, en su último intento por hacer mella al cambio, a través de las mentiras, calumnias y verdades a medias.
Sin embargo, aquellos entreguistas y corruptos no han entendido, que “no se detienen los procesos sociales ni con el crimen… ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos”.