“No fue cateo” en su casa, dice Alito Moreno; “Es intimidación”, asegura
El presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, rechazó que el cateo que se llevó a cabo esta mañana en su propiedad en Campeche por la Fiscalía General del Estado (FGE), pues asegura que en realidad se trata de un acto de intimidación y persecución política por parte de la gobernadora del estado, Layda Sansores, a quien acusa de “amenazarlo” con “recurso público”, además de “espionaje” y dar a conocer “información ilegal”.
Para el líder priísta nada tiene que ver la investigación que la FGE sigue en su contra por los probables delitos de lavado de dinero, peculado, abuso de autoridad, defraudación fiscal y enriquecimiento ilícito.
“No fue un cateo, no fue un cateo a la propiedad. Llegaron afuera de una propiedad en el estado de Campeche, estuvieron haciendo mediciones pero fíjense qué tan importante es que ahí estaba presente el fiscal como para ver la medición. Entonces fueron los actos de intimidación que hacen. Yo he hecho señalamientos muy puntuales de lo que ocurre en la persecución política de este gobierno de este gobierno represor y autoritario”, aseguró Alito durante la conferencia de prensa posterior a la reunión que por seis horas sostuvieron los principales líderes del PRI.
Así mismo, Moreno afirmó que los señalamientos de su posible destitución del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI que personajes como Claudia Ruiz Massieu, Osorio Chong y Beatriz Paredes han hecho públicos durante los últimos días son, en realidad, una persecución del Gobierno Federal porque que el tricolor votó contra la reforma eléctrica.
“Por esto está este ataque sistemático en contra de la oposición; lo que quiere este gobierno es decirle a los ciudadanos y a los políticos: esto es lo que le hacemos a un político opositor que señala y que critica, esto es lo que le va a suceder a quien lo haga”, afirmó.
Finalmente, Alejandro Moreno criticó la existencia de las grabaciones que exhiben posibles delitos cometidos por él, en lugar de explicar el contenido de los mismos, acusando a la actual administración de espionaje y difusión de audios tergiversados y montados, dignos de “una dictadura””.