No soy epidemiólogo ni virólogo. Es una frase que se va haciendo popular para soltar opiniones al respecto, con frecuencia, para deslizar algún pensamiento que abone a la psicosis y el malestar mental de la población.
Bueno, yo tampoco lo soy, y no voy a opinar. Solo quiero compartir números. Simples cifras. Datos comprobables, ahí opinan ustedes lo que quieran, nietecitos.
Francia tiene 676,000 kilómetros cuadrados de extensión. Alberga a 67 millones de habitantes.
España (peninsular) tiene 490,000 kilómetros cuadrados de extensión y 43 millones de habitantes.
Juntas, España y Francia tienen apenas poco más del equivalente a la mitad del territorio mexicano:
1,166,000 km2 contra 1,964,000 km2, pero casi la misma población: 110 millones contra los 126 millones de mexicanos. O sea, su densidad de población es casi del doble. Sus distancias más cortas y mucho más comunicadas.
Ambas están bien por encima del paralelo 22. De hecho, arriba del 36. Hasta ahora, la pandemia ha tenido limitada dispersión abajo del paralelo 22. En todo el mundo. Al bicho algo no le gusta y parece que es el clima.
Ambas se encuentran en la franja de 2 a 12 grados (ya subiendo) de temperatura ambiente. México, en la mayor parte de su territorio, está muy por encima de eso, aunque el norte aun está frío.
Italia tiene el mayor promedio de edad (46 años) de Europa. Esos son 11 años mayor que USA y 16 más que México. Hay muchísimos ancianos en Italia. Y Lombardía, donde el virus ha tenido proporciones catastróficas, está en la misma banda de temperatura mencionada arriba, la peor para enfermedades respiratorias.
España e Italia, merced a las políticas económicas aplicadas, son dos de los cuatro países europeos de la OCDE con menos camas por habitante, y menos profesionales de la salud en el sistema público.
México estaba un poco peor, aunque no mucho, hasta 2019, en que el actual gobierno comenzó a incrementar la contratación y a rescatar los hospitales que dejaron tres sexenios en obra negra.
Esos tres países, son considerados de primer mundo por su desarrollo, industria, etcétera. Tienen más recursos para afrontar un desastre que deje desempleo y parálisis microeconómico. Queda claro que México no, apenas está empezando a pagar la deuda con sus clases más desprotegidas.
Ahora bien ¿qué opinan, nietecitos? Los medios nos dicen que Italia hizo todo mal y nos comparan. Quieren que se realicen acciones como las de esos países. ¿Creen ustedes justificado el pánico inducido en los medios o prefieren la serenidad del gobierno?
El estrés y la psicosis socavan el sistema inmunitario, eso se los dice cualquier doctor. El humor y el relajamiento lo fortalecen. Es una realidad documentada.
Ya me comentarán qué opinan, aunque no sean epidemiólogos ni virólogos.
Por otro lado, les cuento que, para el receso forzado que viene, estará enviando diario en entregas, una novela que escribí, como un regalo para que se entretengan. Sinlineamx será tan amable de publicarla. No es la que fueron tan amables de adquirir el año pasado, es otra inédita.
Nietecitos, los quiero mucho, que tengan salud y alegría.
