Ni ocurrencia ni fracaso; El combate a la violencia dará resultados
Periodismo ciudadano.
Por: Ignacio Hernández
Las cifras de asesinatos en 2019 son escalofriantes, según datos del INEGI, de cerca de 36,000 personas.
No podemos cerrar los ojos ante esta dolorosa realidad; la inercia de los dos sexenios anteriores sigue haciendo estragos en este primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, hay esperanza.
El nuevo modelo de combate al crimen propuesto e impulsado por el presidente, tarde que temprano rendirá frutos; es un proyecto nuevo pero nada novedoso, y está enfocado en las causas profundas, que son la raíz del problema, a los efectos inmediatos que provoca esta realidad de crimen, robo, secuestro y violencia generalizada.
Cuando se le cuestiona al presidente en las conferencias mañaneras sobre este grave problema, la respuesta siempre es la misma:
“Estamos trabajando todos los días desde las seis de la mañana, para resolver lo mas pronto posible este problema”.
También señala, “Primero llevando una estadística sobre los principales crímenes que azotan al país como asesinatos, robos, secuestros, asaltos y otros delitos más”.
El modelo actual es diferente al del régimen anterior, que no se trata ahora de una guerra contra el crimen, sino de combatir las causas que originan la violencia.
López Obrador asegura que “No se puede combatir el fuego con el fuego” que “El mal no se combate con el mal”
El 80% del combate contra el crimen organizado, se da a través de los programas sociales, como Jóvenes Construyendo El Futuro, becas para estudiantes de nivel medio y superior.
La estrategia de AMLO es combatir la brutal desigualdad que existe en México, mediante la generación de empleos bien pagados.
Otra parte fundamental es la Guardia Nacional, que no es un ejercito represor, al contrario se basa en la protección de la vida y el respeto a los derechos humanos.
Hay que serenar al país
Estas declaraciones, que son repetitivas para la oposición, causan desesperación en muchos mexicanos, pero el presidente está en lo correcto, no es una ocurrencia, ni es algo nuevo, esta filosofía para combatir el crimen, tiene mucha historia y ha dado buenos resultados.
Ya desde 200 años antes de Jesucristo, en la civilización griega, filósofos como Aristóteles que fue fundador de la Psicología Criminal, en la que decía que “La pobreza y los aspectos económico, influyen en la conducta del ser humano”
Platón también señalaba que “El crimen es producto del medio ambiente y la miseria”.
En la edad media pensadores y filósofos, como Tomas Moro decía que “El crimen es producto de factores económicas, las guerras y la falta de educación”.
El filósofo escritor y político Luis de Montesquieu señalaba que “El legislador debe esforzarse mas en prevenir el delito que por castigarlo; ya que el espíritu de la ley es la de evitar el delito y proteger al individuo”.
Pero fue en el siglo XVlll, XlX y principios del XX cuando pensadores filósofos y escritores como Juan Jacobo Rousseau quien sostenía que -el hombre es naturalmente bueno, pero que es la sociedad quien lo pervierte-; así como César Lombroso, Enrico Ferri y Rafael Garofalo, -este último considerado el padre de la criminología- sentaron las bases de un modelo de combate al crimen enfocado mas en atacar las causas que los efectos como sostiene ahora el presidente de México.
Fue así como el criminólogo y escritor italiano, Enrico Ferri, a finales del siglo XlX desarrolló la teoría del “Determinismo económico”, que establece los antecedentes de la sociología criminológica, que las conductas criminales se desarrollan a consecuencias de factores externos como la pobreza, el entorno social, y que el estado debe desarrollar políticas sociales para prevenir el delito.
Esta teoría es la base de la lucha contra el crimen que hoy esta dando en México el Presidente López Obrador.
Como pueden observar, la política desarrollada hasta ahora por el presidente contra la terrible violencia que se vive en nuestro país tiene una profunda raíz histórica y es, sin duda, la adecuado, dará resultados tarde que temprano.
No solo el presidente sostiene la teoría de que el combate al crimen se debe hacer atacando las profundas desigualdades económicas, aunque parezca extraño, también el Banco Mundial en su revista de septiembre 3 del 2014 en su artículo
“Esta demostrado: con menos desigualdad se tiene menos crimen”.
Además, en los países como Suecia, Noruega, Holanda y Finlandia, donde se ha aplicado este modelo, se tienen los más bajos índices de criminalidad.
Cabe resaltar algo importante, se debe erradicar por completo la ideología neoliberal del país, este sistema económico es corruptor y corrupto, produce mucha ambición, es increíble pero cierto.
Dicen los grandes padres de la criminología -Se cometen más asesinatos por ambición que por hambre-
Así pues apoyemos la lucha de nuestro presidente en todos los frentes, vamos por buen camino. Por su atención gracias.
Fuentes