A 3 meses de las elecciones en Brasil, Lula mantiene ventaja de 19 puntos sobre Bolsonaro
A tan solo tres meses de la elección, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se mantiene como favorito para la elección presidencial del próximo 2 de octubre en Brasil, pues según la encuesta elaborada por Instituto Datafolha, el exmandatario cuenta con un 47 por ciento en la intención de voto que contrasta con el 28 por ciento de su principal opositor, el actual presidente de ése país, Jair Bolsonaro.
La encuesta, publicada este jueves, que tiene un margen de error de 2 puntos, indica que la ventaja del candidato del Partido de los Trabajadores (PT) sobre el líder ultraderechista continúa estable, con Lula conservando una ventaja de 19 puntos porcentuales, revelando que la contienda será entre estas dos opciones, pues ningún otro candidato consigue superar los dos dígitos de intención de voto.
Así, en tercer lugar está el líder laborista Ciro Gomes, con un 8 % de los apoyos, seguido de una serie de candidatos de centro-derecha que se mueven entre el 1 y el 2 por ciento, entre los que se encuentra la senadora Simone Tibet, del Movimiento Democrático Brasileño (MDB).
El resultado del sondeo, que se realizó entre el miércoles y este jueves a partir de 2.556 entrevistas presenciales en 181 ciudades del país, concuerda con el resto de encuestas publicadas hasta la fecha, pues la popularidad de Bolsonaro se resquebraja en diversos frentes, debido a que el exministro de Educación Milton Ribeiro y dos pastores evangélicos próximos a Bolsonaro fueron detenidos por sospechas de haber montado una trama corrupta que incluía extorsiones a alcaldes y pago de sobornos para liberar recursos del despacho.
Y por otro lado está la inflación ya cercana al 12 por ciento, que ha disminuido de forma aguda el poder de compra de los brasileños y ha obligado al Banco Central a elevar los tipos oficiales de interés hasta el 13.25 por ciento, su nivel más alto desde diciembre de 2016, agregado a que el gobierno de Bolsonaro no ha logrado contener el alza en los combustibles, a pesar de varios cambios en la presidencia de la empresa petrolera estatal Petrobras.
Por si lo anterior fuera poco, los transportistas, que integran la base social de apoyo a Bolsonaro y se han visto afectados por el alza de los hidrocarburos, con medidas que, por el momento, no salen del papel, así como los funcionarios, que reclaman ajuste de salarios, empiezan a iniciar protestas que bien pueden hacer tambalear la actual administración.
Por otro lado, la Administración Bolsonaro también recibió duras críticas este mes por la desaparición y asesinato, en una zona remota de la Amazonía, del experto indigenista Bruno Pereira y el periodista británico Dom Phillips, cuyos cuerpos sólo fueron hallados días después tras la confesión de un pescador furtivo, lo cual ya traspasó fronteras y llegó hasta la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, que denunció que la respuesta inicial de Brasil para dar con el paradero de Pereira y Phillips fue “muy lenta” y que “incluso hubo algunos comentarios despectivos” por parte de algunas autoridades.