Los pobres en la 4T: del olvido a la prioridad

En 2015 el entonces presidente Peña Nieto, viajo en su millonario avión a Londres, con una comitiva de más de 200 invitados; en este acto de dispendio y cinismo la entonces esposa del presidente utilizó un vestido de más de 7,800 dólares y su hija, Sofia, utilizó un vestido de Dolce & Gabbana de 7,274 dólares, esto a cargo del erario.

Lo anterior era un insulto a la inmensa mayoría de la población de este país, en donde más del 60% de los mexicanos se encuentran en pobreza, algunos sobreviven con los bajos salarios, resultados de una fallida política neoliberal implantada desde mediados de los ochenta, precisamente cuando una docena de empresarios comenzó a aparecer en la lista de los hombres más ricos del mundo.

Y es que, contrario a sus argumentos, estos hombres de negocios amasaron inmensas fortunas, no desde el desarrollo y promoción de sus propios negocios, sino por la privatización de empresas estatales. Claro ejemplo es el de Carlos Slim, quien se beneficio con la compra de Telmex, una empresa que, según el gobierno de Salinas de Gortari, se encontraba en la quiebra.

La llegada de la 4T, ha volteado a ver a aquella población que había sido ignorada e incluso olvidada: los pobres de México. El 1 de noviembre de 2018, la residencia oficial de Los Pinos, abrió sus puertas para que todos los mexicanos vieran la suntuosa vida de los ex presidentes del país.

También se creó el Instituto Para Devolver al Pueblo lo Robado, desde donde se ordena la entrega de dinero a las poblaciones más pobres de este país, mediante la venta de carros de lujo, joyas y propiedades valuadas en millones de dólares, para que así municipios de México, que han estado en el abandono, reactiven su economía.

Tal es el caso de Santos Reyes Yocuná, Oaxaca, que, según el Coneval, es el municipio más pobre del país, con 99.9% de su población en pobreza; por esta razón el presidente López Obrador destinó más de $12,836,697.00 obtenidos de la venta de autos de lujo.

Con el dinero recaudado se planea la construcción de una presa, un centro de salud y una escuela de nivel medio superior; sumando a ello, el dinero que el Gobierno Federal ha destinado para la construcción de carreteras con mano de obra de la misma comunidad, para así dar trabajo a los pobladores, algo histórico en este país.

Esta política económica es muy parecida al llamado “New Deal” que implemento el presidente Franklin Delano Roosevelt en Estados Unidos después de la llamada “Gran depresión” de 1929, la crisis económica más severa del siglo pasado; con lo cual se optó por construir carreteras de forma tradicional y con mano de obra de cada región, con lo cual se pudo salir rápidamente de la crisis.

Es de esta manera que se busca fortalecer el mercado interno, para lograr reactivar la economía de muchos municipios del país, siendo el primer paso para poder continuar con la autosuficiencia alimentaria, que actualmente depende en más del 70% de las importaciones con Estados Unidos.

Así mismo se planea construir el llamado “Tren Maya” en la región sureste del país, por lo que ya comienza a llevarse talleres para que sean los mismos pobladores quienes puedan participar en la construcción del nuevo sistema de transporte, que será benéfico para la región, reactivando la economía y que es diez veces menos contaminante que el uso de carros.

Para honrar el Día Nacional de #Calakmul, hoy se firmará el Plan #Calakmul. El objetivo de este acuerdo es acercarnos con las comunidades y actores locales para, en conjunto, conocer y atender sus necesidades e inquietudes. 🤝📄🖋 pic.twitter.com/JCrW9Wd9PQ

— Tren Maya (@TrenMayaMX) August 4, 2019

Esto contrasta con las anteriores administraciones quienes promovían la inversión extranjera, con costos superiores y que se llevaban las ganancias fuera del territorio nacional; pues según indicios, en estos actos había obtención de pago de favores a altos funcionarios públicos, como la trama de Odebrecht, por el cual se ha girado orden de aprehensión contra Emilio Lozoya.

Los resultados de esta nueva forma de hacer política llevarán tiempo, pero comienza a voltear a ver a aquellos pueblos que durante la época neoliberal fueron ignorados.