Después de casi 3 años informando todos los días sobre las actividades del gobierno en su conferencia matutina y respondiendo a cuanta pregunta capciosa se le ha ocurrido a los dueños de los medios chayoteros ordenarle hacer a sus reporteros, para intentar que el Presidente literalmente se ensarte, el mandatario decidió revirar a fin de desactivar la información falsa que estos pasquines sin escrúpulos, vienen difundiendo en forma permanente.
Esta semana el Presidente López Obrador anunció que va a inaugurar una sección especial de la conferencia matutina, donde se dedicarán a desmentir noticias falsas publicadas en los medios y en las redes sociales.
La sección será semanal en un día específico y será similar a las que se han destinado todos los lunes para informar sobre el avance de los grandes proyectos de infraestructura, o sobre el comparativo de precios de los combustibles que presenta PROFECO, o como la de los martes del Pulso de la Salud, a cargo de los funcionarios de la Secretaría de Salud.
Hoy señaló que probablemente esta sección para desmentir noticias falsas será los viernes, para dar tiempo a los medios que sean expuestos como mentirosos para que preparen su réplica durante el fin de semana.
El aparente efecto que tuvo la información falsa en las elecciones del pasado 6 de junio en la Ciudad de México, reveló que una proporción importante de la población, está siendo confundida por la guerra híbrida que se mantiene a través de los medios de comunicación, que no tienen escrúpulos o vergüenza y que a cambio de unas monedas o a causa del resentimiento de sus dueños al ver disminuidos sus privilegios, no se detienen para publicar cualquier mentira.
Como respuesta, el Presidente que conoce a fondo como comunicarse con los ciudadanos y cuya intención es que todos contemos con información veraz para normar nuestro criterio, así como nuestra participación en la vida pública, decidió dar respuesta frontal a los medios embusteros, quienes con toda seguridad serán aludidos directamente junto con sus mentiras, que serán además desmentidos con bases y evidencias.
No solo eso, sino que a diferencia de lo que ellos hacen, tendrán oportunidad de ejercer su derecho de réplica, a fin de que puedan presentar las pruebas con las que respaldan la información que publican, que seguramente los va a colocar en una posición sumamente incómoda, porque la gran mayoría de las mentiras y de la información sesgada que difunden no está respaldada con evidencias.
Para la oposición, la oligarquía y sus marionetas, la difusión de mentiras y calumnias de toda índole, se ha convertido en un deporte más popular que el mismo futbol. Así por ejemplo vemos a un gobernador acusar a Morena de haberse coludido con el crimen organizado para ganarle las elecciones en Michoacán a los partidos que él mismo apoyaba, sin presentar una sola prueba que respalde su enfática afirmación, exigiendo además la cancelación de la elección, porque ya se ve a las puertas de un reclusorio cuando termine su mandato.
Cualquier tema y cualquier excusa es buena para tratar de perjudicar al gobierno, inventando falsedades sin respaldo de evidencias y con los medios prestándose a difundirlas con absoluta impunidad. Aunque lo que merecerían en realidad es ser sometidos a procesos judiciales en los que debieran reparar el daño que ocasionan con su conducta perniciosa, lo menos que debería ocurrirles es ser exhibidos como los farsantes que son en realidad y este mecanismo que se va a llamar “Quién es quién en las mentiras”, es por lo menos un comienzo para que continúen perdiendo la poca credibilidad que todavía tienen entre algunos ignorantes despistados.
Como dijo el filósofo estadounidense Amos Bronson Alcott: “La enfermedad del ignorante es ignorar su propia ignorancia”.