La campaña de noticias falsas está en marcha; objetivo: 2021
Los triunfos reales del presidente López Obrador, son inocultables. Pero la prensa conservadora intenta minimizar el impacto que estos aciertos del presidente pueden tener en la opinión de los ciudadanos a favor al titular del ejecutivo.
Termina una semana en la que se logra concretar un acuerdo dentro de la OPEP, donde México mantiene una postura inflexible respecto al número de barriles de petróleo que debe dejar de producir diariamente.
La cuota que se le había asignado, era de cuatrocientos mil barriles diarios. Rocío Nahle, secretaria de energía, no modificó su postura oficial, basada en una disminución máxima de cien mil barriles por día.
La buena relación que existe actualmente con el gobierno de los Estados Unidos, permitió que la posición de nuestro país fuera aceptada. La OPEP, redujo cincuenta mil barriles a su propuesta original y aceptó que la producción norteamericana, disminuyera los doscientos cincuenta mil barriles que correspondían a México.
Un acuerdo histórico, bien trabajado en el plano internacional, que hubiera desatado elogios de la prensa servil, en tiempos neoliberales y que hoy calla, porque se trata de un triunfo que corresponde al gobierno de la Cuarta Transformación. Esa prensa que no recibe el “chayote” acostumbrado, mantiene silencio ante los avances reales de este gobierno.
Hoy por la mañana, el presidente de México anunció el convenio, mediante el cual el sector privado relacionado con el servicio hospitalario en el país, se compromete de manera solidaria, a poner a disposición del gobierno, el cincuenta por ciento de sus camas para la atención de derechohabientes del IMSS, ISSSTE, INSABI, Marina y Ejército.
Con esta medida, se logra que el sector salud tenga disponibles la cantidad de camas requeridas, para la atención de los pacientes que precisen tratamiento especializado, por contagio de Covid-19.
Los hospitales privados atenderán embarazos y algunas otras enfermedades que requieran la participación de especialistas en diferentes áreas médicas.
De nueva cuenta es notorio el silencio de los medios de comunicación reaccionarios, sobre la importancia de este acuerdo de salud pública.
Señalan el dato como una noticia más, sin darle difusión al convenio, ni hablar tampoco del significado que tiene, en un momento en que se lucha día con día, por ganarle terreno a la epidemia de Covid-19.
Pero sale Eugenio Derbez a decir en un video que se difunde rápido por redes sociales, que hay un médico en Baja California que se queja de la falta de material y equipo suficientes para realizar su labor y toda la prensa reaccionaria entra en acción para señalar una supuesta falla del gobierno, para atender la epidemia.
Se hace necesario que la doctora encargada de los hospitales del IMSS en Baja California, suba otro video en donde desmiente lo dicho por Derbez y replicado por la prensa conservadora. El doctor que cita el cómico mexicano, no trabaja en esa institución.
Denise Dresser se solidariza en Twitter con un médico que fallece por contagio de Covid-19 en nuestro país. Toma como verdadera una noticia falsa que circula en la red y da por buena la imagen de un actor porno, que viste en alguna de sus películas una bata médica. Todo por ese afán permanente de atacar al presidente, usando cualquier recurso que encuentre a la mano.
Las casas encuestadoras, de manera concertada, van disminuyendo puntos al presidente López Obrador, en cuanto a la aprobación y credibilidad que tiene ante el pueblo de México.
No obstante que el manejo de la epidemia de Covid-19 ha sido el acertado, al no registrarse un número alarmante de infectados y fallecidos, sostienen que los mexicanos desaprueban esa estrategia y que preferirían otra donde el toque de queda y la suspensión de las garantías individuales, fueran aplicadas en todo el país.
Difícil creer que efectivamente, los ciudadanos estemos pidiendo un radicalismo que no ha servido de algo en otros países y que se presta a la violación de derechos humanos.
Las encuestadoras mientes sin ningún pudor, puesto que les están pagando bien por elaborar mediciones al gusto de quien cubre el importe de sus facturas.
Escuchamos en radio y televisión, a los periodistas del ayer y a los jóvenes que por desgracia están aprendiendo a vender su opinión y trabajo al mejor postor, reprobar permanentemente toda actividad emprendida por el presidente y por el gobierno de la Cuarta Transformación.
Nada positivo realiza esta administración. Estábamos merj cuando gobernaba el neoliberalismo, nos dicen.
Toda esta suciedad que vemos reflejada en la actividad informativa, tiene un solo propósito: conseguir votos para los partidos conservadores en las ya no tan lejanas elecciones del 2021.
Los empresarios afiliados al Consejo Coordinador Empresarial, se encuentran en campaña. Unidos al panismo y al calderonismo alicaídos, piensan que pueden armar un proyecto neoliberal que enfrente a Morena en el próximo proceso.
Los gobernadores que amagan con más estupidez que sensatez, en abandonar el Pacto Fiscal, están involucrados en el mismo juego. No se van a retirar, porque sus Estados son incapaces de caminar solos. Requieren forzosamente del apoyo federal.
A todos interesa promover la idea de un gobierno, débil, incompetente, torpe y sin visión. Les importa que la figura de López Obrador se desgaste en el corto plazo.
Toda esta guerra de mentiras tiene esa finalidad.
Hay una red lista para atrapar a los incautos que crean que la vuelta de los neoliberales al poder, el regreso de la corrupción y la impunidad, son el camino que conviene a nuestra sociedad y al país.
Se trata de una estrategia “atrapa-bobos”.
Lo saludable en todo este panorama desinformativo, es que el pueblo de México dejó de creer hace mucho en las mentiras que difunde la clase reaccionaria.
No cree en noticias, encuestas, chismes y engaños promovidos por la derecha.
La confianza en el presidente y en su proyecto de Cuarta Transformación es grande.
El pueblo sí aprecia los logros de este gobierno y los hace suyos. Son triunfos de todos, para beneficio de quienes menos tienen.
En 2021, la vieja clase conservadora verá que su campaña de mentiras y su intención de engañar a los ciudadanos, pocos dividendos le deja.
“El pueblo es sabio y sabe lo que le conviene”.
Falta poco para que la derecha fifí, compruebe que ya no es fácil engañar a los mexicanos. Somos pueblo unido.
Malthus Gamba