Feminicidio en el Estado de México: entre el terror y la incompetencia
Enero del 2019, la pequeña Guiselle salió de su hogar y fue a un cibercafé que se encontraba a unas calles de su domicilio, no se volvió a saber de ella; el caso tomó gran relevancia por las movilizaciones de familiares y amigos que pedían conocer el paradero de la menor.
Días después se sabría que la niña había sido violada y asesinada por el dueño del cibercafé donde había ido la menor, el feminicida fue entregado a las autoridades y ahora paga una condena en prisión.
Ante estos hechos y en su noticiero en Multimedios, la periodista Azucena Uresti, dio a conocer que por varios días su equipo de trabajo había tratado de comunicarse con el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, para que fijara una postura y expusiera los trabajos para evitar continuar contra estos terribles crímenes en su estado.
Sin embargo, el gobernador no dio la cara, se escondió y rehuyó a los cuestionamientos que exigen un alto a los feminicidios que ocurren diariamente en su estado; lo mismo que ha hecho en caso de secuestros, cobros de piso, control por parte de miembros del crimen organizado a comunidades enteras, etc.
Y es que, el Estado de México se ha convertido en el estado número uno con violencia y asesinato contra la mujer. A pesar de ello, las autoridades no han declarado alerta de género en la entidad, y por su parte rehúyen a entregar cuentas a los medios o familiares de las víctimas.
En septiembre de este año, Alfredo del Mazo, cumplirá dos años al frente de la entidad mexiquense, un estado que no ha conocido la alternancia política, un estado en que diariamente se escuchan terribles y sangrientos crímenes contra las mujeres.
A pesar de todo ello, el primo del expresidente Peña Nieto, no ha realizado declaración alguna o ha presentado un plan para acabar de una vez por todas, la larga lista de muertes ocurridas por cuestiones de género. Por su parte se ha mantenido inmóvil, alejado del escrutinio popular y mediático, mientras que para millones de mujeres, el salir a las calles del Estado de México, sigue representando un grave temor de no volver a casa.
Es necesario que se obligue a todas las autoridades y mandatarios, independiente de que partido provengan, a atender de inmediato los crímenes que suceden a lo largo de todo el territorio nacional; obligándolos a rendir cuentas y a entregar resultados inmediatos para que se comience a respirar la tranquilidad perdida durante décadas.
Hoy el gobernador Del Mazo se mantiene tranquilo y en paz, pues a pesar de que su estado se encuentra en una grave situación de inseguridad, las marchas y protestas no han alcanzado el palacio de gobierno en la ciudad de Toluca; Alfredo del Mazo se encuentra como desde hace dos años, ausente y alejado del escrutinio público. Y el Estado de México se encuentra a la deriva, con autoridades incompetentes y ajenas al dolor y sufrimiento de millones de mujeres.