En la opinión de Elí González
@calacuayoMX
Un numeroso grupo de profesionales de la salud mental, la cultura y la educación han manifestado que el regreso de las clases presenciales es urgente. Preocupados por la desigualdad educativa que se dio en el ciclo pasado y la salud integral de los niños, niñas y adolescentes, plantean que los gobiernos deben tomar la decisión de instruir el regreso a las aulas.
Aseguran que las clases en casa y a través de computadora afectan física y emocionalmente a niños y adolescentes estudiantes, lo que ha aumentado la consulta ocular un 30%. Se están atendiendo más casos por miopía, fatiga ocular y astigmatismo por el uso de la computadora. En tanto que psicoterapeutas destacan que las clases en casa afectan de manera psicológica reflejándose ansiedad, estrés y depresión.
Los profesionales manifestaron que “la apertura de las escuelas debe ser prioritaria” y advirtieron que “otro año lectivo de escuelas a puertas cerradas tendría efectos psicológicos y sociales sin precedentes”.
Con respecto a los trastornos psicológicos, argumentaron que: “Hay que concebir el cuidado de la salud en términos integrales y tener en cuenta que el deterioro en términos de salud mental implica una enfermedad en sí misma, así como favorece la aparición de otras enfermedades.
El representante en México del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unifec), Luis Fernando Carrera Castro, opinó que el regreso a clases en México es una medida muy necesaria.
El canciller Marcelo Ebrard recibió a Carrera Castro, quien le presentó sus cartas credenciales como nuevo representante del organismo en el país.
En redes sociales, el funcionario mexicano informó que le preguntó su opinión sobre el regreso a clases. “Es indispensable –me dijo– para evitar aumento de la deserción y retroceso social”.
Carrera Castro destacó que sólo en 19 de 193 países continúan cerradas las escuelas.
En un artículo publicado en abril en su página oficial, el Unicef señaló que “la reapertura escolar es una decisión de los gobiernos, que pueden tomar a partir de la evidencia epidemiológica y el análisis de beneficios y riesgos en materia de educación, salud pública y factores socioeconómicos del contexto local, y debe estar guiada por el interés superior de cada niño, niña y adolescente”.
El organismo destacó que la determinación sobre el cierre o la reapertura de escuelas debería tomarse al escala local, a partir de la transmisión del Covid-19, la evaluación del riesgo y las capacidades de los planteles de adaptarse y operar de manera segura, además de un análisis acerca de si la reapertura podrá aumentar la transmisión del virus en la comunidad.
“El cierre de escuelas sólo debería considerarse cuando no hay otras alternativas”, ha planteado la organización.
El nuevo representante del Unicef en México fue ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala. A finales de 1994 empezó su relación laboral el organismo y ha sido su representante en Ecuador, Cabo Verde y Panamá.
Antes de llegar a Naciones Unidas, Carrera Castro fue director de Investigaciones de la oficina regional para América Latina de la Alianza Cooperativa Internacional.
En todos los países, los profesionales de la salud señalan que los principales problemas que tienen los estudiantes, incluso los adultos, son la miopía, fatiga ocular y astigmatismo, muchos de ellos nunca se habían hecho un examen de la vista.
Refieren que cuando acuden a las consultas padecen dolores de cabeza, vista cansada, lagrimeo e irritación, así como falta de enfoque.
Indican que ahora con la pandemia cada vez más gente se está conectando a la tecnología y crecen los problemas visuales; y esto es debido a que los aparatos radian luz azul que va dañando la retina y deteriorando poco a poco la visión de los niños y jóvenes.