AL ROJO VIVO: AMLO hizo en 1 semana, lo que EPN no hizo en 6 años: bajar precios de gasolinas
Está bajando el precio de la gasolina por la reducción del precio del petróleo a nivel internacional y eso nadie lo puede negar.
Muchos simpatizantes le dan todo el crédito al Presidente Andrés Manuel López Obrador, pues la reducción del precio de la gasolinas fue una promesa de campaña.
Por su parte en redes sociales hay quienes le dan el crédito a Peña Nieto, pues según él la Reforma Energética provocaría este efecto a largo plazo.
La oportunidad que desperdició Peña Nieto
Lo cierto, estimado lector, es que Enrique Peña pudo haber pasado a la historia como el Presidente que defendió el precio de la gasolina y devolvió calidad de vida a los mexicanos pero, en lugar de eso, decidió inyectar recursos económicos para mantener el precio del barril de petróleo pues, decían, el presupuesto se nutría fuertemente de la venta del petróleo al extranjero.
Endeudamiento mediante rentas petroleras
Se vendía el barril de petróleo a precio internacional y la diferencia que faltaba para mantener su precio antes de la crisis era sacada de un fondo de endeudamiento llamado “Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios” que administraba la Secretaría de Hacienda de Luis Videgaray, de tal forma que se obtenían casi los mismos ingresos, pero de forma simulada.
El endeudamiento cubierto bajo la cobija del Fondo de Estabilización consistía en adquirir “coberturas petroleras”, es decir, seguros que garantizarán el precio del barril de petróleo aunque bajara en los estándares internacionales. Era básicamente mantener el precio con dinero prestado, pues se tenía que comprar un seguro para tal fin.
Hoy sabemos que la realidad era que para bajar el precio de la gasolina se necesitaba bajar el ritmo de gastos del gobierno en sus tres niveles, a saber, federal, estatal y municipal, pero como eso significaba renunciar a sus privilegios simplemente no lo hicieron.
En 2014 el precio de la materia prima de la gasolina bajó, ubicándose aproximadamente en $73 dólares por barril (si el precio bajaba, lo que sucedió, compensarían las pérdidas con las coberturas petroleras)…
y en 2015 lo más que obtuvimos fue que no hubieron gasolinazos, pero el precio no bajó como debía.
La oportunidad que sí aprovechó AMLO
Ciertamente la baja del precio internacional del petróleo es un factor determinante, pero se requiere de la voluntad política del gobierno para que eso impacte en el precio del combustible y, por consecuencia, que beneficie al ciudadano de a pie.
El Presidente implementó la incómoda (para algunos) austeridad Republicana para reducir el gasto del gobierno en muchos ámbitos, por lo que al tener un gasto bajo en comparación con las administraciones anteriores, le permitió aceptar la reducción del precio de la gasolina.
Muchísimos gasolineros habían estado “mordiendo” el subsidio al IEPS que daba el gobierno, pero al bajar el costo de la materia prima no pueden mantener esta práctica, por lo que se ven obligados a bajar el precio al consumidor de las gasolinas, práctica que ya ha comenzado en varios puntos del país.
De tal forma que, aunque la baja del precio de la gasolina se debe a estándares internacionales, lo cierto es que el gobierno de López Obrador ha decidido no proteger a los empresarios gasolineros para mantener precios altos, tal y como lo hiciera Peña Nieto a partir de 2015, año en el que ciertamente no hubieron gasolinazos, pero llegando a despacharse con la “cuchara grande” a partir de 2016.
En pocas palabras, lo que le debemos a AMLO sobre la baja del precio de la gasolina es Voluntad Política.
Así las cosas.