Llevamos casi 3 años escuchando a la oposición moralmente derrotada gritar a los 4 vientos que ahí viene el lobo, que vamos directo a convertirnos en Venezuela, que la economía se está cayendo, que nos vamos a tardar 100 años en vacunar a la población, que el mal manejo de la pandemia va a extinguir a los mexicanos del planeta, que hay fuga de capitales y muchas otras mentiras más.
Durante el actual proceso electoral la oposición se terminó de volver loca. En la desesperación se tropiezan con todo, van perdiendo sus máscaras en el camino, traicionan los principios que cada partido decía defender, se unen en la persecución del rescate de los privilegios y entran en una suerte de torbellino esquizofrénico que los va sumiendo cada vez más en el fracaso.
Hoy su discurso es en el sentido de que el lobo ya llegó y nos comió. Afirman que el Presidente destruyó al país, contratan todo tipo de medios internacionales para apoyar sus causas perdidas, vociferan toda clase de improperios y mentiras, cometen delitos electorales de todo tipo y lo más grave es que con la dirección, el aval, o la vista gorda de los mandatarios que aún conservan el poder de la derecha en los Estados, amenazan, intimidan, agreden, secuestran y hasta asesinan candidatos en toda la República.
Mientras ellos viven en su mundo sicodélico de mentiras y de odio, vemos por otro lado las opiniones de calificadoras, inversionistas internacionales, reactivación económica, paridad cambiaria, bancos extranjeros y autoridades financieras, diciéndonos que el manejo de la macroeconomía por parte del gobierno mexicano es el adecuado.
Es más que evidente que el riesgo país es menor de lo que era, que fue un acierto no endeudarnos para enfrentar la pandemia, a pesar de lo que ellos mismos recomendaban, que el producto interno bruto va a crecer por encima del 7%, que están entrando al país empresas que antes no lo volteaban ni a ver, que México volvió a tener superávit en su balanza comercial, que la confianza de los paisanos que viven en Estados Unidos va a incrementar el envío de remesas en casi un 50% este año.
También vemos que la estabilidad económica, el proceso acelerado de vacunación, el desarrollo de los grandes proyectos de infraestructura y la distribución de los apoyos sociales, no están sufriendo ningún tropezón, a pesar de lo que desearían los opositores que se encuentran en plena guerra de lodo.
La advertencia de la llegada del lobo es vieja y hoy podemos constatar que el lobo solo existe en el imaginario propagandístico de quienes temían perder sus privilegios, que hoy están desesperados por recuperarlos, aunque esto implique para ellos sacrificar su futuro político, su imagen de sobriedad arrogante y su sonrisa burlona esbozada después de cualquier trapacería cometida.
Hemos dicho varias veces que se les acabó la fiesta y en este proceso ellos se han empeñado en celebrar su propia orgía, aderezada con la droga del odio y con todo el dinero que han podido desviar para financiar sus fraudes electorales. Pero la fiesta como la conocieron siempre se les acaba este 6 de junio.
Este es el momento en que la sociedad consciente ha decidido profundizar seriamente la transformación de la vida pública de México y se los vamos a demostrar en las urnas. No va a haber trampa del INE que funcione ni lloriqueo que valga. No van a tener la mayoría en el congreso y si acaso ganan algo, serán unas cuantas gubernaturas, que van a ser sometidas al escrutinio de los mecanismos contra delitos electorales y financieros con los que ahora contamos, y muy probablemente algunos de sus candidatos ganadores acaben encerrados antes de que termine este gobierno.
Seguirán tratando de aplicar su guerra híbrida para defender lo poco que les quede en una combinación de noticias falsas, amparos judiciales y pataletas de toda índole, pero su realidad aparente sólo seguirá existiendo en el universo paralelo donde viven ellos. Al final la 4a Transformación Va, porque la sociedad está dispuesta a luchar para lograrlo.
Como dijo el médico austriaco Sigmund Freud: “Un buen día, echando la vista atrás, se dará usted cuenta de que estos años de lucha han sido los más hermosos de su vida”.