Tenemos relevo en el INE 2023
♥️♠️Las cartas sobre la mesa♦️♣️
Por Laura Cevallos
@cevalloslaura
A pesar de todas las pretensiones de descalificación del proceso para la selección de quienes están reemplazando a los consejeros electorales por parte de una oposición que se sabe incapaz de señalar corruptelas sin morderse la lengua, porque son sólo las pataletas ridículas de quienes saben que no tienen la razón, la selección de nuevos consejeros es constitucional, legal y fue producto de un proceso transparente. Ellos, sin embargo, seguirán golpeteando, a ver si una es de chicle y pega.
La convocatoria que se formuló con base en las reglas emitidas para el efecto en la reforma electoral de 2014, y que curiosamente fueron elaboradas en contubernio, perdón, en acuerdo con el PRI, el PAN, el PRD y el Movimiento Ciudadano, estableció algunos “avances” con que se sintieron profusamente demócratas:
- Cambiar de IFE a INE, con atribuciones de organizar, ahora, elecciones federales y las locales
- Crear un sistema nuevo de fiscalización de las elecciones federales y locales
- Se amplió de 9 a 11 los miembros del órgano de dirección del Instituto, en un Consejo General, con duración de 9 años en el cargo sin posibilidad de reelección, pero inconstitucionalmente extendió los ya empezados cargos de Lorenzo Córdova y su Secretario General
- El nuevo INE tendría facultades extraordinarias para expedir lineamientos o normatividad en materia de competencias propias de los OPLES (PREP, Encuestas y sondeos; Observación electoral, Conteos rápidos y Producción e impresión de materiales)
- El proceso de elección de los consejeros se haría por una convocatoria y un comité técnico evaluador
Los textos que reformaron al artículo 41, fracción V, Apartado A, Constitucional, que da instrucciones sobre el modo en que se elegirá a los miembros del Consejo General, son resultado del Pacto por México (2014) y ahí se acordó que para la elección de nuevos consejeros electorales, se emitía un acuerdo con la convocatoria pública, las etapas completas con fechas y plazos; el modo de selección del Comité Técnico Evaluador y de dónde se nombrarían sus miembros. En esta fase, la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados fue ilustrada sobre cómo debía actuarse si, al momento de haber sido calificados de idóneos los perfiles de los aspirantes, no se llegaba a un consenso con las 2/3 partes de los tribunos, se acudiría a la selección mediante el método de insaculación, al cual no hubo oposición alguna. También, que una vez conformada la lista de aspirantes que cumplieran con todos los requisitos señalados en la Constitución y las leyes de la materia, se acataría lo exclusivamente señalado en el artículo de marras, para el procesamiento de cada etapa. En un súper resumen, va.
Primera etapa:
- Licenciatura con cédula y título, por más de 5 años de antigüedad y experiencia en el área electoral;
- Sin antecedentes penales ni partidistas;
Para aspirar a acceder al concurso, se debía entregar:
- Carta de solicitud;
- Ensayo de exposición de motivos, de 10 cuartillas;
- Currículum vitae (formatos público y versión libre);
- Copia de acta de nacimiento, credencial para votar, título y cédula profesional;
- Carta de protesta donde se comprometía el aspirante a acreditar fehacientemente los requisitos señalados en el apartado anterior;
- Carta de aceptación de las bases y procedimientos;
- Copia de uno o varios textos en la materia, publicados en libros, revistas impresas o de formato digital, de autoría propia.
Segunda etapa:
- Evaluación de parte del Comité Técnico de los requisitos constitucionales y legales; evaluación de idoneidad específica para cada cargo.
FASE DE EVALUACIÓN:
- Examen elaborado entre los 7 miembros del Comité, impreso el mismo día de su aplicación.
- Los mejores puntajes calificaron para la siguiente etapa y se publicaron los nombres de quienes obtuvieron los mejores resultados.
- Se abrió, en la página de la Cámara, específicamente en el micrositio, un apartado para que, quienes tuvieran que expresar objeciones sobre los aspirantes, no dudaran en aportarlas.
FASE DE IDONEIDAD:
- Cada expediente de quienes llegaron a esta fase, fue revisado por, al menos, dos miembros del comité. En caso de que existiera alguna relación laboral o amistosa de los aspirantes con los examinadores, se expusieran a modo de recusación para seguir conociendo y evitar las influencias personales.
- Asimismo, se revisó que cada aspirante contara con:
- Autonomía e independencia
- Trayectoria profesional
- Logros y participación en materia democrática
- Principios democráticos, de género y de inclusión
- Virtudes, valores y ética profesional
- Vocación para el servicio público
- Claridad y calidad en la expresión escrita
- Capacidad de argumentación
- Capacidad de detección de problemas y soluciones en el sistema electoral.
CUARTA FASE:
- Entrevista, a los mejores 50 mujeres y 50 hombres.
- Se evaluó la trayectoria, experiencia profesional, ética y valores, perspectivas disciplinarias, y criterios transversales sobre inclusión y diversidad geográfica.
- Adicionalmente, y con autorización expresa de los aspirantes, se pudo hacer una revisión adicional de otros documentos e información.
TERCERA ETAPA:
- Entrega de listas de aspirantes (10 mujeres, 10 hombres, para conformar 4 quintetas)
CUARTA ETAPA:
- Selección de 1 aspirante de cada quinteta.
Ahora es más claro que las burdas amenazas desde el PAN para impugnar el método “poco democrático” para determinar a los hoy consejeros, solo son bravuconadas, porque al someterlo a una interpretación de algún miembro de estos solícitos de la Corte que no resuelven lo que tienen atrasado, pero se aprestan a sus caprichos, tendrían que decirle a Marko Cortés que es menester acudir a clases de lectura de comprensión, debido que desde 2015 se plasmó así en la Constitución y así se ha utilizado en tres ocasiones anteriores para determinar los perfiles que ocupan consejeros en funciones.
La insaculación NO ES, pues, un método antidemocrático, como acusa tan banalmente el líder panista, sino la segunda posibilidad para la denominación de consejeros: por consenso, la primera; por insaculación la segunda y, como tercera y última, puede someterse esta designación al Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y conociendo a estos sujetos como aquellos que siempre se tienden ante el “poder superior”, pero no captan que ese poder es el pueblo, segura estoy que habrían preferido que fueran sus amigos en la Corte los que nombraran a los hoy Consejeros de INE.
Una de las personas que conformaron el Comité de Evaluación, hizo un pronunciamiento especial sobre seis perfiles, a los que consideró inidóneas, “por tener parentesco o afinidad con actores políticos relevantes, o bien (porque) tienen o ejercieron funciones políticas en los gobiernos federal y estatales”. Maite Azuela, emergida necesariamente de la derecha mexicana, siendo analista para el Universal, Brozo y Foro TV, creyó que señalar las relaciones familiares de personajes como Berta Alcalde, Netzaí Sandoval o la misma Guadalupe Taddei, las quitaría del camino, para poder tender el puente a otros perfiles, no solo con esos mismos lazos, sino con antecedentes en otras administraciones, pero de su #TeamOpo. Sin embargo, otro personaje del Comité, Sergio López Ayllón señaló que esas relaciones no eran obstáculo suficiente para bloquear el derecho que tenían de participar en el ejercicio y, como consecuencia técnica, el propio Tribunal Electoral señaló que el momento para haber acudido ante esa instancia judicial para declarar la inidoneidad, había precluido, por haber superado todas las etapas sin alguna denuncia previa.
Pero lo siguieron intentando, al punto de decir que la hoy Presidenta no tenía título y cédula profesional. ¡Por favor! ¡Tantita seriedad de parte de la oposición! Si desde el principio se explicó que de los requisitos mínimos básicos era la documentación que acreditara el currículum, cómo iba a superar todas las etapas sin esos requisitos. Además, hay que aclarar que esta es una de esas excepciones en la Constitución, en las que el título es requisito, porque para ser diputado, senador o Presidente, no se requiere de otra cosa más que la ciudadanía y un mínimo de edad, así como no tener antecedentes penales. Pero aquí, como en el caso de los jueces, magistrados y ministros de la Corte, sí que se exige la escolaridad, por tratarse de temas que requieren un manejo técnico del derecho electoral.
A pesar de ellos, los que ahora sí quieren tocar al INE, hay cambio de postura junto con la llegada de los nuevos Consejeros. De momento, inicia su presidencia señalando la urgencia de revisar cómo se usan los recursos públicos que se les dan (ojito a la autonomía opaca) y promete, junto con sus compañeros de generación, renovar al INE y sus procesos en materia electoral y administrativa.
Confiamos en ellos, pero si no, como lo juramentan siempre, se los demandaremos. Que no quede duda.
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