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NIÑOS COMUNISTAS VS ROBOTS
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NIÑOS COMUNISTAS VS ROBOTS

A estas alturas del partido, la clase conservadora se comienza a dar cuenta del alcance que con seguridad tendrá el Proyecto de Transformación que vive el país. Cinco años después de su monumental derrota en el 2018, el impacto del cambio que se opera en México, por fin se les presenta en forma evidente.
¿La causa? El modelo de la Nueva Escuela Mexicana y los Libros de Texto Gratuitos.

Los corruptos del pasado pensaron que perder el poder político en el país, era un tropiezo que los lastimaría en el corto plazo y solo durante un periodo de seis años. Daban por descontado que con la fuerza del dinero empresarial y la de los medios de manipulación bajo su control, un nuevo asalto a la presidencia de la república y las gubernaturas que se hubieran perdido, sería tarea fácil, una vez concluido el sexenio del presidente López Obrador y luego de que hubiera amainado la fuerza del huracán que desencadenó el hoy presidente.

Después comprendieron que quizá ese periodo sería un poco más largo, dado que la “cola” del ciclón “Andrés Manuel”, dejá remanentes políticos bien posicionados, para mantener el poder presidencial en manos de Morena. Pero aún así, doce años pasan rápido y los negocios empresariales son fuertes y pueden esperar tiempos mejores.
Hoy se dan cuenta que el cambio amenaza con ser irreversible y que el retorno del PRI-PAN-PRD al poder, es casi imposible. Y si esos partidos “fachada” no consiguen seguir adelante, el Poder Económico, que es quien en realidad gobernaba en México antes de la llegada de López Obrador, tampoco regresará para incrementar su riqueza, a costa del erario federal y el de los estados.

¿Qué es lo que vieron y los tiene tan molestos?

Que está por iniciar un Modelo Educativo distinto al neoliberal, donde los maestros toman de nueva cuenta un papel básico en la instrucción de los niños y jóvenes del país y donde los alumnos reciben una educación integral, donde se hace énfasis en el Humanismo, la ética y los valores morales, desechando como base del aprendizaje, el preparar a los niños a competir despiadadamente, dentro de una sociedad neoliberal gobernada casi en su totalidad por las leyes del mercado.

Todos recordarán la reforma educativa de Peña Nieto y Aurelio Nuño, donde los maestros se la pasaban haciendo reporte e informe tras informe. Buena parte del tiempo que ocupaba el educador en el salón de clases, lo destinada a la preparación de informes que eran calificados por mandos administrativos superiores. El maestro no tenía libertad para ajustar sobre la marcha y aportar al conocimiento de sus alumnos. Todo se diseñaba desde el escritorio y debía cumplirse al píe de la letra, si no se querían tener problemas con la superioridad.

Los libros de texto neoliberales, suprimieron buena parte de la historia nacional y casi por completo la universal. Desterraron el civismo y la ética como materias indispensables. La lectura de comprensión brillaba por su ausencia. Y el resultado fue que a nivel mundial, los alumnos mexicanos eran calificados mediocremente, por su bajo nivel de aprovechamiento.

Todo eso es una realidad inocultable, que muchos recuerdan aún y sobre la que hay pruebas en abundancia.

Se hacia necesaria una reforma educativa, que resolviera un problema que afectaba el futuro de las nuevas generaciones de estudiantes.

Y la Cuarta Transformación inició la tarea desde hace más de un año, acudiendo a maestros, especialistas, pedagogos y sociedad en su conjunto, para sacar adelante el Plan Educativo de la Nueva Escuela Mexicana, que tiene como meta el garantizar la educación desde la edad de 0 años, hasta los 23 cumplidos y ofrecer posibilidades para que esa base educativa se refuerce durante toda la vida, teniendo presente que aprender, es un disciplina de toda la vida. Aprender y actualizar lo aprendido, es el trabajo básico en todo ser humano.

Y esto disgusta sobremanera a la clase conservadora. ¿Dónde queda entonces la “sociedad analfabeta” fácil de manipular? ¿Dónde queda el poder de los medios de comunicación y de los intelectuales integrantes del “círculo rojo” que eran la inteligencia social y pensaban a nombre de todos? ¿Dondé queda la superioridad formativa de los egresados de escuelas nacionales y extranjeras privadas, plasmada en títulos, maestrías, doctorados y diplomas ostentosos?

Si todo ciudadano mexicano accede a una educación de calidad, donde la base del conocimiento está en el Humanismo y no en el Mercantilismo despiadado, el sentido de la vida cambia. La existencia humana deja de ser una carrera loca para alcanzar riqueza, fama y poder y se vuelve una aventura personal, donde desarrollar todas nuestras capacidades personales, se convierte en el fin verdadero de toda vida.

A los conservadores les molesta eso, porque una sociedad preparada, no es manipulable. Por eso inventan hoy la mentira del “virus comunista” que amenaza a “nuestros niños”. Como si la niñez le hubiera importado a Claudio X González y a su gente, cuando intentaron privatizar la educación.

Llega a tanto la desesperación de los neoliberales corruptos, que Roberto Madrazo, uno de los dueños de Latinus, coloca un mensaje en Twitter donde advierte que en el futuro próximo, los niños mexicanos estarán enfrentando a “robots con inteligencia artificial”, para ocupar puestos de trabajo, y que la Nueva Escuela Mexicana, los limita para derrotar a estos enemigos metálicos en el campo de batalla.

La verdad es que lo que les molesta, es saber que está por nacer una nueva sociedad, educada para pensar y no para obedecer los mandatos del Poder Económico.
Una sociedad que sabe que existen diferencias históricas entre empresario y trabajador. Un ciudadano que sabrá defender sus derechos e impedir todo abuso que signifique el regreso de la corrupción al poder.

Los “niños comunistas” peleanado contra robots altamente calificados, es una más de las ridiculeces que corren hoy en día en medios de comunicación y redes sociales, en un intento desesperado de la oposición por frenar a la Nueva Escuela Mexicana y la educación basada en nuevos libros de texto gratuitos.
Otras ideas infames conservadoras, han sido las de quemar los libros de texto, como lo propone el presidente del PAN, Marko Cortés, o encerrarlos en bodegas en lugar de distribuirlos en escuelas, como está haciendo el gobierno de Guanajuato.

Son actos desesperados que no tienen posibilidad de convertirse en rechazo social uniforme.

La Nueva Escuela Mexicana va. La Cuarta Transformación va.

Y el futuro de los mexicanos no puede ser empañado por intereses mercantiles, o por la codicia del sector más corrupto de la sociedad, que solo tiene interés en una cosa.
Seguir saqueando al país y a los mexicanos, por los siglos de los siglos.

Y eso, no lo vamos a permitir los millones de mexicanos que estamos a favor del cambio.

Malthus Gamba

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