Muñoz Ledo dice a Proceso que “van dos años del sexenio de AMLO y la 4T no se ve”
Porfirio Muñoz Ledo, aspirante a la dirigencia del Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), dijo en entrevista para la revista Proceso, que aún no se alcanza a ver la Cuarta Transformación “ni el fin del neoliberalismo”.
Muñoz Ledo, quien fue el encargado de pasar la banda presidencial de manos de Enrique Peña Nieto a las de Andrés Manuel López Obrador el primer día de diciembre de 2018. Dijo que a dos años de la llamada “4T no se ve”.
“La gente de abajo –que tiene muy buena voluntad y mucha fe– sigue creyendo en la Cuarta Transformación”
Algunos errores para el expresidente de la Cámara de Diputados son las decisiones de política pública en las que reina ‘la arbitrariedad’ sobre la razón.
Y mencionó dos ejemplos:
La imposición de un ‘presupuesto recesivo’ y la eliminación a “rajatabla de 109 fideicomisos públicos”.
El político de izquierda mexicano dijo a la periodista Neldy San Martín de Proceso, que lamenta que el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) haya adoptado un pensamiento único y que la bancada en San Lázaro se haya convertido en “un eco servil del Ejecutivo”.
“Dicen los estatutos del partido, en sus principios, que no debe haber pensamiento único, que se vale la disidencia si hay un objetivo común. Entonces, si no hay pensamiento único, tampoco debe de haber orden único”
“Los problemas que tiene el país exigen la primacía de la razón no de la arbitrariedad, porque si no, no vamos a salir. La primacía de la razón significa que si tú reacomodas el gasto público tiene que ser por una reforma cuidadosa. Para reformar al Estado tú no amputas esto, dices todos los fideicomisos fuera, todos, no, sino que analizas, adelgazas, no amputas”,
Cuando se le preguntó si considera que en el gobierno de López Obrador hay tufos ‘autoritarios’, Muñoz Ledo habló del símbolo que representa el tabasqueño, símbolo de un movimiento opositor al que acordaron apoyar en cada elección presidencial desde 2006, pero dice que una vez en el gobierno, tenía que haber un funcionamiento orgánico de las instituciones, con división de poderes, con federalismo.
“Los problemas que tiene el país exigen la primacía de la razón no de la arbitrariedad, porque si no, no vamos a salir. La primacía de la razón significa que si tú reacomodas el gasto público tiene que ser por una reforma cuidadosa. Para reformar al Estado tú no amputas esto, dices todos los fideicomisos fuera, todos, no, sino que analizas, adelgazas, no amputas”, dijo para en entrevista para la Revista semanal.
La entrevista completa puede ser consultada en la edición 2,300 de Proceso.
Con información de Sin Embargo