LA MARCHA DE LOS GARCÍA LUNA
Genaro García Luna no puedo alegar en su juicio, que era víctima de una persecución política, tal y como habitualmente declaran los panistas corruptos.
Estaba siendo juzgado en una Corte norteamericana.
Tampoco pudo decir que el presidente del país quería consumar una venganza personal en su contra.
Joe Biden ni lo conoce.
Las afirmaciones de su esposa en el sentido de que siendo ahorradores constantes y gracias a los préstamos con “pagos chiquitos”, se puede amasar una considerable fortuna, fueron desestimados por un jurado que no se tragó una mentira tan poco creativa.
Genaro García Luna tuvo un juicio justo en Estados Unidos y el día de hoy es encontrado culpable por el jurado. La sentencia que alcance, será dictada el 27 de junio próximo.
Si este juicio hubiera sido celebrado en tribunales mexicanos, el panismo, junto con sus ahora hermanos priistas, hubieran señalado que el gobierno del presidente López Obrador, había cometido un atropello y una infamia en contra de uno de los próceres de Acción Nacional. El “dictador” se había atrevido a condenar a prisión a un inocente.
Y ese mensaje en defensa del hoy criminal que espera sentencia, lo hubiera replicado en el coro habitual, toda la corrupta prensa conservadora.
Pero no pudieron.
La diputada de Morena, Andrea Chávez, coloca un tuit poco después de conocerse el veredicto del jurado que condena a Genaro García Luna, en el que informa a los ciudadanos que el grupo parlamentario panista, salió en bloque del salón principal en la Cámara, al conocerse que García Luna fue encontrado culpable de los cinco cargos por los cuales fue juzgado.
Con la cola entre las patas, los panistas nada pueden alegar en favor del exsecretario de Seguridad de Felipe Calderón, ni en favor de su partido, que permitió que estos dos personajes, uno como presidente y el otro como responsable de la seguridad de los mexicanos, bañaran de sangre al país, mientras engañaban al pueblo diciendo que se combatía con firmeza a la delincuencia.
El cártel más poderoso, más temible y más violento, despachaba desde las oficinas de la presidencia.
Porque Felipe Calderón está embarrado en esto, hasta el cuello.
Como bien dijo su correligionario Diego Fernández de Cevallos: “Si Felipe Calderón sabía lo que Genaro García Luna hacía, era cómplice y criminal. Y si no lo sabía, era un idiota”.
No hay espacio hacia adonde hacerse. La oposición está en este momento en el suelo de nueva cuenta.
Y lo está merecidamente, porque 36 años de neoliberalismo, dejaron mucho dolor, muerte, inseguridad y miseria padecida por millones de mexicanos, que hoy ven que uno de los verdugos del pueblo, pagará con años de cárcel, una pequeña parte del dolor provocado a miles de familias en el país.
Si a esta sentencia en la Unión Americana agregamos la serie de investigaciones que se siguen en la capital del país, en contra de los integrantes del llamado “cártel inmobiliario”, en el que participan panistas de primer nivel, podemos darnos cuenta de que los políticos conservadores se han dedicado durante años a “negocios” que operan al amparo del poder y al margen de la Ley.
Ese sector conservador es el que habla hoy de la “defensa de la democracia” y que organiza una marcha en defensa de un Instituto Nacional Electoral, tan corrupto como cualquier funcionario público de extracción panista, o priista.
El PAN es visto por los ciudadanos honestos del país, como la fábrica de corruptos que llegan a la administración pública para hacer todo tipo de negocios, en beneficios personal.
Genaro García Luna, a quien defendieron en un principio todos los panistas de cola larga, es el ejemplo claro de hasta donde llegó la corrupción con los gobiernos de la “alternancia”.
Las piezas del rompecabezas comienzan a acomodarse y vemos mucha posibilidad de que en el futuro próximo, Felipe Calderón sea llamado ante la justicia del vecino país del norte, para responder por los mismos delitos que hoy tienen prisionero a su colaborador y amigo, Genaro García Luna.
Hoy vemos entretejido el futuro de García Luna, con el del PAN y por consiguiente, con el de la oposición mexicana.
Después del veredicto de culpabilidad que rinde el jurado en contra de un panista corrupto ¿qué mexicano con el mínimo de honestidad y honradez, saldría a desfilar en defensa del INE y del grupo político conservador?
Un fraude electoral avalado por el INE, llevó a la presidencia a Felipe Calderón. Y Calderón entregó el aparato de seguridad del país, a su amigo García Luna, que ya traía contactos e historial delictivo, desde el sexenio de Vicente Fox.
El INE operó vergonzosamente para que esta dupla de delincuentes, alcanzara los cargos más importantes en el país.
¿Y nos viene a decir la oposición que hay salvar al INE?
Más bien hay que salvar a los mexicanos de un INE que está involucrado en complicidades vergonzosas.
El presidente López Obrador ha repetido en las últimas dos conferencias mañaneas, que la defensa de la democracia, solo es un pretexto de la oposición en este momento.
El interés de Claudio X González y su gente es colocarse favorablemente ante la opinión pública. Levantar el cartel del PRIAN, para que sean competitivos en 2024.
A esta campaña de “lavado profundo” le ha invertido mucho dinero la clase empresarial representada por Claudio.
Y todo se ha ido a la basura, al ser declarado culpable de todos los cargos Genaro García Luna.
El PAN es exhibido a nivel internacional y no México y los mexicanos, como llegó a asegurar el corrupto periodista Riva Palacio.
La marcha opositora del domingo que viene, puede ser calificada desde ahora, como “La Marcha de los García Luna”
Los que defienden la corrupción en el INE, en el PRI, en el PAN y en el resto de la oposición, están trabajando en contra de México.
Pretenden que regrese el modelo neoliberal que impulsaron y defendieron estos corruptos.
Que México regrese a los tiempos de Fox, Felipe Calderón y Genaro García Luna.
Que gobierne de nuevo la delincuencia disfrazada de gobierno. Que entremos de nuevo en los terrenos de la muerte cotidiana de miles de ciudadanos.
Que todo funcionario público tome como modelo, las trayectorias de Genaro García Luna y Felipe Calderón.
Para eso es en realidad la marcha del domingo.
Para preparar el regreso del panismo al poder.
Y eso no lo podemos, ni lo vamos a permitir la inmensa mayoría de los mexicanos, que nada tenemos que ver con delincuentes.
Nunca más un gobierno corrupto, cómplice de criminales y criminal él mismo, al asociarse a organizaciones que dañan el tejido social de un país, que busca un futuro mejor para las generaciones que vienen.
Un futuro mejor para nuestros hijos.
Se los aseguramos. La oposición no va a regresar al gobierno de México.
Malthus Gamba