En 2018 se terminó el negocio de la mentira periodística

En la opinión de Elí González

@calacuayoMX @eligonzalezhz

¿A quien le beneficia la muerte de un periodista de renombre?

Bueno, la oposición al gobierno puede argumentar lo que quiera, pero no requiere de un profundo análisis para entender lo que sucedió y a quien le beneficia el escándalo mediático.

En este caso, no se trata de si es un periodista veraz, si es un periodista vendido o si es un periodista chayotero, se trata de un periodista famoso, y es que el PRIAN ya ha matado muchos periodistas, como en el caso de Miroslava Breach, donde el móvil fue la investigación que llevaba en contra de autoridades del PRI y del PAN. Y porque no decirlo, actualmente han matado muchos periodistas, para de inmediato en nado sincronizado tratan de golpear al presidente López Obrador.

En este contexto, a pesar de todo su intento de bajar la aprobación de AMLO, no han logrado absolutamente nada, al contrario, cada golpe lo sube más y más, no sería ocioso analizar que subieron el nivel de ataques golpeando más fuerte, con un periodista famoso que pudiera hacer mella en la aprobación presidencial, atentando contra la vida del periodista Ciro Gómez Leyva la noche del jueves 15 de diciembre del 2022.

Cuando gobernaba el PRIAN, mataban a periodistas de investigación, reportaje y opinión porque exponían los abusos sociales, exhibían los negocios sucios y los vínculos de autoridades con el crimen organizado. El periodismo crítico logró demostrar que las autoridades y policías, eran a su vez jefes de plaza de los carteles de la droga, la extorsión y el secuestro.

No es para nadie un secreto que el PRIAN, es históricamente socio del crimen organizado y el narcotráfico. Y para muestra, hay varios jefes policiacos y un ex secretario de seguridad pública, sacrificando su libertad, por proteger a sus jefes, los expresidentes de la República; hay exdiputados y exalcaldes prófugos de la justicia, porque se les demostró ser narcotraficantes. (TODOS DEL PRIAN).

Desde Luis Echeverría Alvarez quien mediante su cuñado Rubén Zuno Arce, operaba el narcotráfico con Caro Quintero “El Narco de Narcos”; desde Carlos Salinas de Gortari que operaba el crimen organizado con su hermano Raúl Salinas de Gortari, hasta Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto que operaban el crimen organizado con Genaro García Luna.

Todos aquellos que trataron de callar la investigación periodística y el periodismo crítico, son los mismos que al perder el control sobres ello, decidieron sumarse al ataque de quien los protege. Porque el periodismo que siempre ha estado en peligro no es el de Ciro, no es el de Dóriga, no es el de Televisa o TV Azteca, es el periodismo de a pie. Nunca el de las elites.

El régimen de corrupción que operaba el país como sucursal del poder económico y del crimen organizado hasta 2018, es el mismo que hoy puede cometer las peores bajezas sacrificando a sus mismos aliados, con tal de golpear al presidente. ¿Y por qué no?, un golpe más fuerte atacando a un periodista famoso.

El PRIAN ha demostrado que por defender sus intereses y privilegios, es capaz de matar a propios y extraños. Tan claro como que mataron a José Francisco Ruiz Massieu, presionaron el “suicidio” de su hermano Mario Ruiz Massieu quien en su carta póstuma señala a Ernesto Zedillo como autor intelectual de la muerte de su hermano y la de el, mataron a Luis Donaldo Colosio, al Cardenal Posadas Ocampo y a un sin fin de alcaldes y políticos de todos los niveles.

Y es que siendo socios del crimen organizado, nada se les dificulta pues tienen el dinero, las armas, el personal de acción y el recurso para la ejecución intelectual y material de los crímenes.

Generalmente el crimen organizado actúa sin análisis, sin una estrategia arquitectónica o de ingeniería, por eso son escandalosos y letales. Cuando se asocian con personal de inteligencia como los políticos, siempre son más silenciosos y estratégicos para ocasionar un daño que sea más mediático, que físico. Pareciera que este fue el caso de Ciro.

¿Cuáles son los principales objetivos de la oposición en el caso de Ciro?

2- Lo más importante, CALLARLO.

La oposición busca que con el ataque a Ciro, el presidente deje de exponer las mentiras periodísticas y permita que sigan mintiendo impunemente sin que pueda el, López Obrador, demostrar con hechos y evidencias, que están mintiendo. Ahí está el principal objetivo de la oposición. Callar al presidente para poder mentir a sus anchas y lograr subir un poco en preferencias para las elecciones de 2023 y 2024

La oposición cree que callando al presidente logrará engañar a los votantes. Lamentablemente para ellos como dice la biblia, si ustedes callan las piedras hablarán. Y en el remoto caso que lograrán amordazar al presidente, millones de personas hablaremos por él y los seguiremos desmintiendo todos los días.

Los periodistas que se suman al ataque al presidente, no lo hacen por ignorancia, lo hacen porque son parte de ese grupo que se beneficia de la sociedad del PRIAN, con el crimen organizado. Y podrán sacar mil columnas diarias culpando al presidente, pero no lograrán que la verdad de sus crímenes, sea callada por la influencia que tienen en los medios.

Los periodistas del viejo régimen, los políticos y el crimen organizado siempre se han sabido impunes; y porque han probado que a nadie en México le ha importado la vida de un periodista veraz, mataron a aquellos que a cambio de unas monedas consiguen que un sicario acabe con la vida de un periodista.

Constantemente las personas que desmentimos con hechos las mentiras de la prensa vendida, somos amenazados de muerte. ¿Que casualidad que las amenazas lleguen a nosotros cuando hablamos del mal periodismo y los malos políticos? ¿Por qué el crimen organizado nos ameniza cuando son los últimos en ser mencionados? Sencillo, porque estamos tocando al periodismo y políticos socios de ellos.

Los mismos que en el pasado mataban a los periodistas que los criticaban, siguen matando a los que los siguen criticando. Y ahora han querido desviar la atención culpando al presidente, pero la sociedad entera sabe que son ellos; saben que el presidente no necesita que alguien vaya a hablar bien o mal de él, porque todos los días expone sus triunfos y sus fracasos en las mañaneras.

El negocio de la mentira periodística se terminó en 2018 y están tratando de recuperarlo a cualquier precio.