Por Sergio Calvo Navarijo
Jesús González Pimentel, líder del Poder Judicial, mantiene licencias de ausencia a laborar por más de 22 años, pero eso si con goce total de su salario, con la anuencia de magistrados, ministros y complacencia de los trabajadores.
Es tal la protección que le da la Suprema Corte de Justicia en su conjunto que el señor González Pimentel puede omitir una de sus obligaciones más importantes como trabajador del Estado. Es decir, se puede dar el lujo de no presentar datos en sus declaraciones patrimoniales y nadie dice nada. Una prueba más dela opacidad con que se maneja esa institución.
En un reportaje que presenta la periodista Daniela Barragán, en el portal Sin Embargo, se pueden leer con lujo de detalles, todas las anomalías que este obscuro personaje, hace al frente de esos trabajadores desde hace casi 10 años, con una reciente reelección más.
Se reporta con un salario de 52 mil pesos mensuales, pero no reporta compras, propiedades, gastos, viajes y todo lo que un servidor público tiene la obligación de declarar. Tal vez las cuentas no le cuadren, Y por que no investigarlo desde la Unidad de Inteligencia Financiera, a la mejor le salen por ahí compras de casas, departamentos, carros, viajes, gastos en tarjetas de crédito que no corresponde a su salario.
Y es él, claro, el que salió arengar a los trabajadores a protestar por la desaparición de los privilegios que gozan los altos funcionarios, haciéndoles creer que son ellos los afectados. Pero no, él tiene que pagar los favores que le han hecho los magistrados y jueces por más de 20 años de pagarle sin que este haragán, vividor trabaje.
Y aún no sabemos cuántos familiares y amigos de sus jefes ha tenido que darles plazas y de que nivel. Como el caso de la senadora Olga Sánchez Cordero, que logró la muy envidiable cifra de 8 parientes dentro de la nómina, comenzando con su hija, Paola García Villegas Sánchez Cordero. Con un salario, inconstitucional, mayor al del presidente de la República, por 212 mil pesos, y 7 familiares más incrustados en la nómina controlada por el sindicato.
Y será acaso el único caso de jueces y magistrados que recomendaron, al líder sindical, parientes y amigos para engrosar la privilegiada nómina de este intocable poder Judicial.
Porqué no se transparenta y se hace público este órgano como lo hacen los otros. Y los periodistas y medios de comunicación no investigan como lo hacen, Sin Embargo, Contralínea, Sinlineamx. México merece otro nivel de periodismo.
