Carlos Augusto Jiménez Zarate
@CarlosAugustoJZ
Está por cumplirse los primeros 15 días del año 2020, y los opositores de AMLO no cesan en su afán de guerra sucia.
Resulta claro que, para los opositores de la 4T cualquier cosa que el presidente haga, para ellos está mal por default. En el tema de los medicamentos y del INSABI, están alentando a seguir una ruta legal en contra del nuevo instituto. Ahora los neoliberales se quieren posicionar como defensores de la salud pública, cuando ellos siempre se han pronunciado porque la salud y la educación nacional, sean manejados por entes privados.
Con un cinismo sin igual defienden el seguro popular, como si de verdad les hubiera importado la salud de los mexicanos más pobres, durante los 35 años que sometieron al país al yugo neoliberal.
El INSABI servirá para darle servicios de salud en todos los niveles a los más necesitados económicamente; en un país que lleva décadas en la simulación de la seguridad social esto es disruptivo.
Tras el regreso del avión presidencial, los opositores gritan furiosos que solo se esta perdiendo dinero, pero si AMLO lo usara para sus giras, inmediatamente lo denunciarían por ostentoso y fantoche; si por invitar a comer a su esposa a un conocido restaurant del centro de la ciudad de México, lo catalogaron de ser un fifí.
Pero las consignas opositoras, no solo van dirigidas a la forma y dinámica del actual gobierno, cada vez más los contenidos emitidos contra AMLO se adentran en los terrenos de la ilegalidad, y hasta en un demencial odio contra el presidente López Obrador y su familia.
Para la mayoría de los líderes opositores, y para muchos neoactivistas que con plena libertad pueden expresarse en contra de AMLO, ya no solo se trata de estar en contra de un gobierno de AMLO por ideología política, o por su acción gobierno social; sino que promueven actos de guerra civil, como lo fue llamar a un golpe de estado en plena séptima zona militar ubicado en Nuevo León, y por si fuera poco intentan alentar acciones de sabotaje fiscal.
Sin embargo, todas estas acciones, se quedaron eclipsadas por el reciente tuit de la actriz, Laura Zapata quien, tras el nacimiento del primer nieto de AMLO, maldijo la descendencia del presidente.
El tuit de la actriz, corona una campaña de guerra sucia de larga data, tan solo hace unos días, el hijo pequeño de AMLO fue víctima de un ciberacoso, por una inaudible grosería que dijo durante un vídeo del presidente.
Esto ha sido una muestra de los argumentos de la oposición, por eso están moralmente derrotados, como magistralmente había declarado el presidente; de ahí que el odio crónico de los opositores contra AMLO, no sea capaz de propagarse en la sociedad mexicana.