En la opinión de Elí González
@calacuayoMX
Antes del neoliberalismo la sociedad vivía en grupos, apenas con las secuelas que dejaron los éxitos y los fracasos de gobiernos anteriores.
Algunos decían que todos los seres humanos deberíamos ser iguales y que, por lo tanto, todos tendríamos derecho a participar en el gobierno, otros pensaban que sus gobernados, deberían ser una especie de esclavos que solo deberían producir riqueza para ellos y otros que todos deberíamos tener condiciones similares.
Urgía realizar cambios en el modelo de gobierno, aunque lo que se vivía, social y económicamente no era tan malo como el que nos esperaba con modelos más perversos como el del neoliberalismo.
Con la llegada del neoliberalismo, dijeron que sería una combinación de democracia y libre mercado, pero en realidad combinaron el autoritarismo con el mercado, fingiendo que éste es libre, pero en realidad es un apéndice del poder político, mejor llamado capitalismo.
El neoliberalismo como el conjunto de ideas políticas y económicas capitalistas según nos dijeron, definía la no participación del Estado en la economía, dejando por fuera cualquier injerencia gubernamental, fomentando así la producción privada con capital único sin subsidio del gobierno. Pero hicieron todo lo contrario. Todo lo subsidiaba el gobierno, empobreciendo más a la sociedad, para enriquecer a sus amigos y prestanombres.
El capitalismo era en realidad el de favorecer a amigos y familiares. Una verdadera farsa que finge libre mercado, pero en realidad se construyen fortunas de amigos y prestanombres de los poderosos.
En México se impidió el libre funcionamiento del intercambio, se impidió la generación de riqueza y se reemplazó la democracia por el favoritismo (corrupción).
Nuestro querido país sufrió por décadas, devaluaciones, endeudamiento, etc… con el argumento de que la globalización nos permitiría exportar materias primas, que sirvieran para que nuestro país entrara en el mundo del desarrollo. Pero lo que en realidad estaban haciendo era que nosotros los mexicanos, los ayudáramos a convertirse en unos de los mayores poseedores de fortunas. Siempre abusando y construyéndolas con al poder político y nuestro esfuerzo.
El PRIAN construyó grandes fortunas, a costa de nuestro sufrimiento, favoreciendo y entregando nuestra riqueza a sus amigos, que siempre estuvieron alrededor del gobierno y sus concesiones.
En el interior del Consejo Mexicano de Negocios (CMN) hay quienes se hicieron ricos con el PRIAN y gracias a nuestras riquezas. Pero existen divisiones entre quienes, quieren seguir robando y entre quienes prefieren mantenerse cerca de quien puede ofrecerle ganancias lícitas y sumar a su ya enorme fortuna.
Lo cierto es que en el gobierno actual, ellos ya no son importantes. Y por tal motivo México padece los ataques de una de las alas de ese poder económico que se resiste a incrementar su fortuna de manera lícita como otros lo están haciendo. Necesitan que regresen los gobiernos que los favorecían con dinero público para sus empresas privadas. Por un lado está el grupo que representa Claudio X González y por el otro, Carlos Slim. El primero añora la transa, y el segundo, mejor le chinga para ganar dinero lícito y opera corrigiendo sus errores del pasado.
Pertenecer a un grupo poseedor de grandes fortunas, no significa coincidir en todo. Es por eso que vemos dos visiones en ese grupo, uno es el que quiere seguir viviendo del erario y otro el que prefiere trabajar honestamente y trabajar en las megaproyectos del gobierno actual.
