AMLO… ¿dispuesto a solicitar consulta de juicio a ex-presidentes?
Debo reconocer que sinceramente me equivoqué, pues en algún momento supuse que el Presidente Andrés Manuel López Obrador utilizaba el tema de la consulta popular de juicio a ex-presidentes para “picar” a la oposición para que así cometieran errores que la Fiscalía General de la República pudiera señalar, atraer y llevar a proceso judicial.
A pregunta expresa Hans Salazar, corresponsal de Sin Censura con Vicente Serrano en las Conferencias Mañaneras del Presidente, sobre el tema de la consulta popular para juzgar a los ex-presidentes de México, AMLO respondió que debe ser precisamente el pueblo quien decida si se realiza el proceso judicial o no, aunque él sigue en la posición de estar en contra.
Lo anterior hubiera quedado para la anécdota si no fuera por qué comentó las tres maneras en que se puede realizar dicha consulta, lo que es una preocupación debido al poco tiempo que queda para poder recabar firmas de ciudadanos e ingresar la solicitud:
1. Recabar las firmas del 2% del padrón electoral vigente.
2. Que lo soliciten las dos terceras partes de la Congreso de la Unión.
3. Que la solicite el Presidente de la República.
Con esto, estimado lector, el presidente López Obrador deja la puerta abierta de par en par para realizar la consulta popular de juicio ex-presidentes y cómo es su costumbre deja un mensaje entre líneas y dicho mensaje es que
Si no hay acuerdo en el Congreso y no se juntan las firmas necesarias, él estaría dispuesto a solicitarla a tiempo
Para que se realizaran las gestiones administrativas adecuadas ante el Instituto Nacional Electoral y demás autoridades competentes para que se pueda llevar a la práctica.
Esta es una de las pocas veces en que el presidente López Obrador, de una manera muy diplomática, da a entender que si bien es cierto que no es una persona vengativa, tampoco va a permitir que a sus expensas se humille la figura de la investidura presidencial que desde que empezó el sexenio es constantemente insultada a través de comentarios hipócritas, burlones, inexactos y hasta falsos por parte de la oposición y la prensa vendida.
Así las cosas.