Una herramienta estratégica para complementar el desarrollo infantil
Podrán ser tiempos modernos y muchos verán con malos ojos que los niños ya no salgan a jugar tan frecuentemente como muchos de nosotros lo hicimos hasta hace un par de décadas. Sin embargo, si algo podemos tener por seguro es que los niños “siempre serán niños”, y sus inquietudes serán siempre las mismas. Por ello, aunque ahora con medios tecnológicos, ya sea una consola de videojuegos, una computadora o incluso un celular, los infantes siempre buscarán divertirse. De nosotros depende que las nuevas herramientas tecnológicas no se conviertan en obstáculo, sino herramienta que les permita un sano crecimiento a la vez que se divierten.
Videojuegos para complementar el crecimiento.
Organismos internacionales como Understood especializados en la educación y formación de los niños reconocen que existen diversos beneficios de los videojuegos, ya que éstos pueden ayudarles a desarrollar habilidades y establecer conexiones sociales, además de que muchos de los infantes que juegan videojuegos a menudo son muy creativos.
Estudios recientes revelan que las habilidades lectoras de los niños que juegan videojuegos pueden mejorar ligeramente, además de que hay programas como Minecraft que les permite desarrollar habilidades visoespaciales. Además, en todo juego virtual existe un desafío, de manera que el menor tiene una oportunidad para aprender a deducir posibles soluciones, lo que ejercita su capacidad de planificación, organización y pensamiento flexible.
Centros académicos como University of Advance Techologies (UNIAT) han confirmado que jugar videojuegos no solo trae entretenimiento, sino que también propicia beneficios para la salud, personalidad y aptitudes si se sabe usarlos adecuadamente, por lo que lejos de ver esta forma de entretenimiento como un obstáculo para el sano desarrollo infantil, es ideal considerarlo como una herramienta, la cual, desde luego, no debe suplir otras actividades como salir a jugar físicamente para pasar de la teoría virtual a la práctica de campo.
A videojuegos más complejos, memorias más avanzadas.
Como sabemos, con el paso del tiempo, los juegos se van haciendo más complejos y por lo mismo requieren de mayor memoria, así como unidades de almacenamiento que permitan que los programas corran sin problemas de lag además de la posibilidad de guardar las jugadas. Resulta interesante como una consola que al inicio se desempeña al 100%, con el paso del tiempo y conforme se juega más, comienza a ralentizarse.
En este contexto, para los jugadores de consola, tener suficiente espacio de almacenamiento es más que crucial. Resulta curioso cómo hasta hace poco tiempo 500GB solía ser suficiente para darse abasto. Pero conforme va aumentando el tamaño de los juegos, se requiere más almacenamiento para soportarlos.
Es por ello que Kingston ha dedicado parte de su experiencia a garantizar que la tecnología para jugar cumpla con su papel de manera eficiente.
Las mismas empresas de videojuegos se han asegurado de que en su afán de mantenerse a la vanguardia no terminen ahorcándose al desarrollar consolas que solo permiten cierta capacidad de crecimiento. Y muestra de ello fue la PS5 que desde septiembre de 2021 permite a sus propietarios agregar capacidad al instalar un SSD interno para expandir su almacenamiento.
Así que, un buen regalo para los pequeños este Dia del Niño, un videojuego no es del todo una mala idea, y si ya se tiene un buen equipo, esta es una oportunidad para que de la mano de un juego nuevo incluyamos una SSD.