Aquí te explicamos, la mentira de Lilly Téllez y el mito de las cuentas inactivas

Con la aprobación de la ley que establece las nuevas reglas para que se disponga del dinero depositado en cuentas inactivas que permanecen en los bancos, las cuales están relacionadas con actividades ilícitas, los desorientados de siempre entraron en histeria.

Con la mala información que obtuvieron de los medios tergiversadores de información y de algunos diputados y senadores de oposición, comenzaron a publicar mensajes en redes sociales, advirtiendo del peligro inminente de perder todo el dinero que se tenga en cuentas bancarias, si éstas se dejaban sin actividad inmediata, aprovechando para lanzar todo tipo de imprecaciones llenas de calificativos hacia el dictador que les iba a robar sus ahorros.

Nada de esto sorprende, porque esta reacción exagerada es impulsada por la desinformación en la que voluntariamente han decidido colocarse, pues sus fuentes de noticias pagadas por la oligarquía no han hecho más que mantenerlos en la más absoluta confusión sobre la realidad nacional. Esta minoría alquilada es parte de la guerra desinformativa financiada con la que se aprovecha cualquier oportunidad para torcer la verdad publicando mentiras y que por desgracia ayudan a que la minoría enajenada como borregos, interpreten a modo la realidad.

Lo que pocos saben es que cuando una cuenta quedaba inactiva durante 5 años, ese dinero se transfería a lo que llaman “la cuenta global”, quedándose con los intereses y obligando a cualquier cuentahabiente que intentara disponer de su dinero inactivo, a pasar por un proceso de tramitología interminable, incluso por uno jurídico que se tarde o temprano se terminaría perdiendo a favor del banco. En pocas palabras se lo robaban impunemente.

A partir de la promulgación de esta ley, los bancos tendrán que entregarles a los gobiernos el dinero de esas cuentas inactivas, para que se utilice en financiar a las instituciones de seguridad pública y probablemente, se aplique también en el reforzamiento de programas sociales del gobierno federal, lo cual es un mejor destino que el de engrosar las bolsas de los banqueros, que de por sí ya están ganando en México lo que nunca antes soñaron.

Sin embargo esta medida tampoco se aplicará a todas las cuentas inactivas, en las que se calcula existen alrededor de 21 mil millones de pesos intocados durante más de 6 años, sino a las que están presuntamente relacionadas con actividades criminales, cuyo monto inactivo se estima en 14 mil millones de esos 21 mil.

Las proporciones en las que se van a repartir estos fondos equivalen a 45% para el gobierno federal, 30% para los estatales y 25% para los municipales, que siendo realistas muchos de los dos últimos son muy poco confiables como para entregarles dinero adicional sin fiscalizarlos estrictamente. Sin embargo, así se aprobó la iniciativa.

Por otro lado, hay que dejarle claro a todos los que se pusieron nerviosos a raíz de su odio descontrolado en contra del dictador, que la iniciativa no fue presentada por él, sino por los diputados, sin que el Presidente estuviera enterado sino hasta que comenzaron los ataques en su contra en las redes sociales.

De nueva cuentra queda claro el daño que los opositores quieren hacer al nuevo gobierno, a través de sus políticos y medios de propaganda pagados, con acciones desesperadas. Es mejor informarse a través de los canales del gobierno federal y en los medios de información serios.
Nadie está planeando robarles el saldo de sus tarjetas de débito, no dejen que los vuelvan locos.

Como dijo el escritor inglés Samuel Johnson: “Cualquier preponderancia de la fantasía sobre la razón es un grado de locura”.