CdMx vs Alianza Federalista, ¿Quién aporta más al Gobierno Federal?
La polémica detonada por los 10 gobernadores que están muy excitados por abandonar el pacto fiscal que ellos mismos y sus partidos aprobaron en 2007, durante el gobierno negro de Calderón, enarbola el argumento de que sus Estados mantienen a la federación por medio del pago de sus impuestos.
Parece que estos funcionarios de palabras ligeras y calumnias fáciles, no han hecho su tarea en el cálculo de las cantidades que aportan y las que reciben sus Estados de parte de la federación.
Sucede que todos estos estados juntos, entregan a la federación un 30% de las aportaciones totales en impuestos que el gobierno federal recibe de parte de todos los Estados. Lo interesante es que reciben de regreso un 30.1% de todas las cantidades que el gobierno federal entrega a las entidades federativas. Es decir, en realidad no dejan nada para que se reparta a otros estados distintos a los que ellos gobiernan; de hecho, en conjunto reciben más de lo que aportan.
Para analizar un caso en el que esta queja sería más que justificada, veamos lo que sucede con la Ciudad de México. Esta entidad sola aporta el 46.2% de las cantidades totales que los Estados entregan a la federación, equivalente a un 53% más de lo que aportan estos 10 Estados juntos. Sin embargo, la Ciudad de México sólo recibe el 7.4% del dinero que el gobierno federal entrega a todas las entidades federativas.
En pocas palabras, si alguien está manteniendo a otros Estados de la federación es la Ciudad de México y no los 10 Estados que se están quejando de esto.
Dentro de estos 10 Estados si hay quienes reciben menos de lo que aportan, como Nuevo León, Tamaulipas y Colima, los cuales están prácticamente manteniendo a los otros 7 en este balance de fondos. Estos 3 Estados aportan el 19.1% de los fondos que recibe la federación de parte de todos los Estados y sólo reciben el 8.1% de lo que se reparte entre las entidades federativas. Pero son sus socios en el discurso los otros 7 Estados, como Jalisco, Coahuila, Chihuahua, Guanajuato, Aguascalientes, Durango y Michoacán, los que son beneficiados con ese 11% de los fondos totales que los tres primeros estados aportan de más.
Estos 7 Estados solo aportan el 10.9% de los fondos que todos los Estados pagan, y reciben el 22% del dinero que la federación reparte entre las entidades federativas. Casualmente estos 7 gobernadores resultan ser los quejosos más estridentes, cuando el pacto fiscal los benéfica mucho más de lo que los perjudica.
Si lo que buscan, como es evidente, es ganar algo de popularidad comportándose como adolescentes berrinchudos que no fundamentan sus lloriqueos en argumentos veraces o lógicos, sería una mejor idea que comenzaran a tratar de hacer un buen gobierno dentro de sus entidades.
Podrían empezar por aplicar planes de austeridad con los que eviten el dispendio del gasto público que hoy los tiene viajando en aeronaves privadas, transportándose en camionetas nuevas blindadas, rodeados de guarda espaladas, mientras sus vecinos pagan de más para que puedan seguir haciéndolo.
Estamos ante la presencia de otra representación de ridiculeces y ocurrencias de funcionarios casi subnormales, que no atinan siquiera a presentar argumentos claros y bien estructurados en relación con sus quejas; no son capaces de presentar una propuesta lógica o congruente, porque ese no es su estilo.
Se concentran en hacer ruido, en llorar, en señalar al gobierno federal con falacias y tonterías, ejerciendo el más puro estilo de una oposición moralmente derrotada y muy adolorida por la pérdida de privilegios inmerecidos, y hoy también por la pérdida de aceptación popular que ya no les tiene respeto.
Como dijo el poeta escocés Robert Burns: “Los bribones y los necios son plantas de cualquier terreno”.