En la opinión de Elí González
@calacuayoMX @eligonzalezhz
Lo sucedido en la mina “El Pinabete” en Coahuila, donde lamentablemente siguen atrapados 10 mineros, nos remonta a lo sucedido en la mina ocho de Pasta de Conchos donde persiste la impunidad, abandono y agresión que Grupo México cometió en contra de los 65 trabajadores mineros en el municipio de San Juan de Sabinas, Coahuila.
La diferencia en este caso es que toda la fuerza del estado está trabajando para rescatarlos con vida, y fue el mismo presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, quien dio la instrucción de invertir todos los recursos posibles para el rescate.
La tragedia en Pasta de Conchos ocurrida en el año 2006, mostró la complicidad evidente y la corrupción del gobierno panista, para proteger un caso claro de negligencia criminal de Germán Feliciano Larrea Mota Velasco y su empresa.
En el año 2010 la historia nos abofeteó con lo sucedido en Chile, cuando con entereza y determinación, rescataron con vida a 33 mineros atrapados a 750 metros de profundidad en San José de Copiapó, después de 69 días de que ocurrió el derrumbe de la mina. ¿Qué pasó entonces en México en 2006? NEGLIGENCIA CRIMINAL de quienes hoy, quieren dar clases de gobernanza.
Ante la explosión de la mina de Pasta de Conchos, Grupo México, Vicente Fox y Larrea abandonaron a los 65 trabajadores atrapados a sólo 120 metros de profundidad, al quinto día de una simulada escenografía de rescate. Vicente Fox, Francisco Javier Salazar, entonces secretario del Trabajo, y principalmente Germán Larrea, decidieron cerrar la mina, sin saber si los mineros estaban con vida.
Fue a todas luces un homicidio industrial el que se cometió, sin ninguna investigación y sin castigo para los responsables. Una vergüenza histórica que el sindicato denunció en muchas ocasiones. Lo que, si hicieron en el gobierno de Fox y de Felipe Calderón, fue perseguir a quien los evidenció, fabricándole delitos para que cerrara la boca.
Durante décadas de gobiernos PRIISTAS y PANISTAS, se degradó la posición de respeto hacia México en el marco político y jurídico internacional, sólo para proteger a un pequeño grupo de empresarios, que no valoran ni respetan la vida ni la salud de los trabajadores.
Esos mismos empresarios y su grupo de poder, representado por Claudio X Gonzalez, ha sembrado la perversidad, el abuso y la corrupción en este hermoso país que no se lo merece. Sin embargo, con toda su fuerza económica, puja por recuperar esos privilegios para seguir dañando a México y seguir saqueándolo. Por eso atacan con toda su fuerza, al presidente que le vino a devolver la dignidad a este país.
Personajes cobardes y putrefactos, como Javier Lozano, quien fue secretario del trabajo de Felipe Calderón, Vicente Fox y el mismo Calderón exigen que AMLO esté presente en las labores de rescate, aunque ya lo hizo. Pero en ese entonces, ni Vicente Fox, ni Felipe Calderón se presentaron jamás a la mina para ordenar y vigilar que se realizaran las tareas de rescate.
El tiempo pasa, y se siguen sintiendo dueños del mundo. Y si son dueños, de la corrupción en la que convirtieron a nuestro gran país. Esa corrupción que costará años desterrarla. Porque lograron impunidad corrompiendo periodistas y medios de comunicación; abogados mercenarios, jueces, cámaras empresariales, políticos y ex presidentes quienes también son socios de esos empresarios.
Los medios de comunicación perdieron la dignidad, gente sin escrúpulos para pervertir y deformar la realidad y la justicia, en los cuales se promueven linchamientos públicos absolutamente falsos y calumniosos sin recato y sin ética al presidente de la república (AMLO) y a todos los que apoyan su ideología.
El gobierno de López Obrador tiene que dar una lección de honor y de moral al determinar que se haga justicia en Pasta de Conchos, en El Pinabete y en toda la nación donde sembraron corrupción, saquearon y se adueñaron de la riqueza nacional, y donde siguen cosechando los personajes más pestilentes de la política y los medios de comunicación.
Ya basta de abrir carpetas sin llegar al fondo, ya basta de tantas investigaciones que no terminan en nada. Vamos a gritar fuerte, para que se haga justicia y que Vicente Fox como Felipe Calderón y Peña Nieto, terminen sus días en la cárcel.