Dra. Bárbara Leonor Cabrera Pantoja | Entre letras, con mi café y a un “x” de distancia me encuentran como @_BarbaraCabrera
“Los que estaban antes están inconformes y quieren regresar. Y yo también quiero que regresen, pero lo que se robaron”
Así lo dijo el Presidente Andrés Manuel López Obrador en la mañanera del 19 de febrero de 2024.
En México, el 2 de junio acudiremos a las urnas, será la elección más grande de la historia contemporánea de nuestro país. Elegiremos al Presidente de la República, renovaremos el Congreso de la Unión: 128 escaños en el Senado y 500 curules en la Cámara de Diputados.
El Instituto Nacional Electoral (INE) en coordinación con los Organismos Públicos Locales desarrollarán las actividades para la elección de Gubernaturas en los estados de Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán; la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, así como de Congresos Locales, Ayuntamientos, Juntas Municipales y Alcaldías. ¡En total se elegirán más de 19 mil cargos!
La de 2024, será una elección de dos Proyectos de Nación: el que pugna por un Estado de Bienestar y en contraposición se encuentra el de los conservadores entusiastas del neoliberalismo que tantos estragos ha causado a este país. En suma, estamos frente a dos visiones de país, la del pueblo y la de los oligarcas.
Hoy padecemos dos fenómenos orquestados desde la oposición a la Cuarta Transformación: primero, se han declarado en moratoria constitucional –figura jurídica inexistente- cayendo en un amodorramiento legislativo, negándose a cumplir el mandato del pueblo a quien representan, diciendo no a todo lo que se proponga por quienes piensan distinto a ellos; y segundo, acuden al poder judicial para combatir el proceso de transformación en que nos encontramos, haciendo uso de lo que se conoce como lawfare, esto es, una guerra judicial donde el protagonismo asumido por el Poder Judicial se agrava, conformándose en los hechos como parte del grupo opositor, por ende, es impostergable poner la mirada sobre la actuación de este poder público con el objetivo de reformarlo a los tiempos que nos está tocando vivir y para ello, además de la Presidencia de la República, se requiere mayoría calificada en ambas Cámaras. ¡Vayamos por el Plan C!
Del pueblo surge la candidatura de la izquierda, la de Claudia Sheinbaum quien arrancó campaña presentando el Proyecto de Nación para que siga la transformación, asumiendo su obligación de llevar al país por una senda de paz y libertades; del lado de los oligarcas, está la candidatura de la derecha, representada de cuerpo entero por Xóchitl Gálvez.
De esta última vale la pena recordar su origen, así lo cuenta el periodista Álvaro Delgado en el libro “La disputa por México. Dos proyectos frente a frente para 2024” que escribió junto a Alejandro Páez Varela.
“Detrás de los altos muros cubiertos de enredaderas tipo inglesas hay una mansión, en las Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, que tiene al costado izquierdo, frente al jardín arbolado, una terraza con sillones junto a dos sombrillas que se abren si el sol castiga.
Es la residencia del magnate Claudio X. González Guajardo. En esa terraza, justo al iniciar la pandemia y casi en la clandestinidad, se concertó el más ambicioso proyecto unitario de la oposición en casi un siglo, lapso en el que los partidos coaligados hegemonizaron el poder y cuya fase neoliberal de tres décadas los uniformó.
En esa terraza, un espacio abierto bajo la fronda de dos árboles de cuyas ramas cuelgan adornos de vidrio, se pactó formalmente el proyecto conservador que desafía al del Presidente Andrés Manuel López Obrador, denominado Cuarta Transformación, definidos ya los dos polos históricos que se alistan para chocar en 2024”.
Así Xóchitl Gálvez, envuelta en el desprestigio de la guerra sucia, propone construir una prisión de muy alta seguridad y tecnología de punta, ¡un mega penal de máxima seguridad al estilo Borolas! porque lo de la derecha no es atender las causas, sino la represión y el castigo.
En tanto el fenómeno Xóchitl no levanta, la Doctora Claudia Sheinbaum inicia campaña con 30 puntos de distancia y creciendo en las preferencias electorales.
Mientras Claudia Sheinbaum presentó su Proyecto de Nación, estructurado en 100 puntos, agrupados en 14 capítulos; Xóchitl Gálvez ante la ausencia de proyecto, tuvo la ocurrencia de firmar un pacto de sangre, después de pegar un chicle en una silla del INE; cualquier cosa se puede esperar de quien se asume indígena y vendedora de gelatinas para salir adelante e intentar repuntar en las encuestas.
Mientras a Claudia Sheinbaum la apoya el pueblo, a Xóchitl Gálvez la respaldan los impresentables, corruptos, represores, impunes, rateros y conservadores de siempre, y para dar la apariencia de ser más, se apuntalan con un Troll Center.
Mientras a Claudia Sheinbaum la comunidad migrante la respalda; a Xóchitl Gálvez la repudian en el extranjero por entreguista y traidora a la patria, al estilo Carlos Salinas de Gortari.
Esos son los dos proyectos de Nación: el del Humanismo mexicano para consolidar la Cuarta Transformación; del otro lado el de las mentiras y el miedo para intentar regresar al poder para seguir saqueando y dañando a este gran país.
De Jorge Álvarez Máynez ni hablamos, la candidatura del Partido Movimiento Ciudadano de Dante Delgado, será testimonial, de mercadotecnia en redes sociales y de lucha para no perder el registro. Una caricatura apenas vista, con un personaje anticlimático como abanderado.
Y como lo bueno es importante divulgarlo ampliamente, les comentaré lo esencial del Proyecto de Nación para que Sigamos Haciendo Historia, liderado por la Doctora Claudia Sheinbaum.
Como anticipé, está conformado por 100 puntos clave, agrupados en 14 puntos o capítulos que vale la pena enunciar:
- República democrática, justa, honesta, libre, participativa y responsable.
- República fraterna.
- República educadora, humanista y científica.
- República lectora y cultural.
- República sana.
- República con vivienda.
- República de y para las mujeres.
- República con trabajo y salario justo.
- República rural justa y soberana.
- República soberana y con energía sustentable,
- República próspera y conectada.
- República que protege el medio ambiente y sus recursos naturales.
- República con derecho al agua.
- República segura y con justicia.
En el portal de Claudia Sheinbaum que es https://claudiasheinbaumpardo.mx/ puede consultarse el documento completo. Vale la pena lo lean con atención y apoyen difundiéndolo en sus redes.
Que no se olvide:
¿Por quién estamos aquí? POR EL PUEBLO.
¿A quién hay que servir primero? AL PUEBLO.
¿En quién confiar? EN EL PUEBLO.
¿Con quién transformar? CON EL PUEBLO.
¿Quién nos protege? EL PUEBLO.
¿Qué somos? PUEBLO.
Acudamos felices este 2 de junio a las urnas para mostrar el poder del pueblo y refrendar nuestra confianza en el Proyecto de Nación iniciado por Andrés Manuel López Obrador y que tendrá continuidad con sello propio con Claudia Sheinbaum.
Porque el pueblo soberano manda y es claro que respaldamos la Cuarta Transformación. No se pierda de vista: solo el pueblo puede salvar al pueblo.
Es todo por hoy.
¡Hasta la próxima Nornilandia!