“Crecimiento bajo no garantiza recesión”: Banorte
Gabriel Casillas, economista en jefe de Banco Mercantil del Norte (Banorte), afirmó que normalmente en los primeros meses de inicio de cada sexenio, se dan fenómenos económicos de desaceleración, mientras arrancan inversiones en los sectores público y privado, mismos que se reactivan conforme avanza del sexenio.
Contrario a lo que dicen otras entidades financieras, Casillas descartó que la economía mexicana se encuentre en recesión, pese a las bajas en expectativas de crecimiento que se han emitido.
Aún cuando el crecimiento del PIB en el segundo trimestre sea negativo (lo mismo que en el primero) éste no es cercano a cero
Además, si se voltean a ver factores como el empleo y el consumo, estos no están en recesión
Hace unos días Banorte y otras instituciones financieras movieron su expectativa de crecimiento de 1.5% a 0.8%, lo que, según el especialista económico en cuestión.
Paralelamente a los pronósticos catastróficos que anuncian algunos analistas económicos Marcos Ramírez Miguel, director general de Banorte, vio con buenos ojos el anuncio de que los banqueros tendrán disposición de prestar hasta $500 mil millones de pesos a empresarios y emprendedores de todos los tamaños de diversos sectores productivos.
Dicho anuncio se dio en una reunión sostenida entre el Presidente de la República y miembros de la Asociación de Bancos de México
Nos reunimos con la Asociación de Bancos de México. Intercambiamos opiniones y, entre otras cosas, me informaron que están dispuestos a otorgar créditos para la actividad productiva hasta por 500 mil millones de pesos. Hay confianza en México. pic.twitter.com/UPaF7HYYhW
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) July 24, 2019
Remírez Miguel estimó que ahora que los recursos ya se encuentran disponibles, las instituciones bancarias deberán competir entre diferentes segmentos para poder colocarlos.
Es una buena noticia, todos estamos en el mismo lado. Los recursos ahí están, se va a desatar la competencia para prestarlos
Así mismo señaló que, pese a la desaceleración económica, no ven ningún riesgo fuerte en alguno de sus productos financieros, lo que podría estar sucediendo también en otros bancos.