¿Quién tiene capacidad para amarrar de nuevo al tigre? Nadie.
La última y desesperada “estrategia” opositora, es de una vileza propia de quienes forman parte del sector social educado durante tiempos del neoliberalismo predador.
A esa generación, rica y poderosa en lo que respecta al mundo material, se le identifica también por su pobreza ética y moral, misma que los impulsa a cometer todo tipo de actos deshonestos, que muchas veces cruzan la tenue línea que los separa del delito premeditado.
A pesar de que la victoria electoral de Morena y aliados fue contundente, grupos de un radicalismo que raya en lo grotesco, aseguran que tienen pruebas suficientes para señalar que, mediante un algoritmo, el Instituto Nacional Electoral, cómplice de Morena, cambió los resultados finales, otorgando a Claudia Sheinbaum los votos que correspondían a Xóchitl Gálvez y viceversa.
El ultraderechista que difunde en redes sociales esta burda mentira, es Pedro Ferriz de Con, un periodista de la vieja guardia, hoy caído en desgracia y periodísticamente en estado agónico, por la falta de “chayote”.Un proceso electoral que fue auditado en varias ocasiones para demostrar que nada ilegal o preparado estaba en operación, intenta ser manchado por el fascismo ubicado en la extrema derecha opositora mexicana.
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Ferriz es un periodista de tercera y como especialista en cuestiones cibernéticas, no llega a ser un aprendiz de décima. Esa persona y “su equipo”, han detectado un fraude mayúsculo, precisamente cuando la elección ya fue calificada y no hay nada que hacer al respecto. Salvo escandalizar en medios de manipulación y redes sociales.
Ya campaña sucia que corre por este carril, no tiene destinatario nacional, porque pocos mexicanos se tragarían un cuento, o una mentira tan burda. La intención de esta farsa infantil, es dañar la imagen de México y su democracia, en el extranjero.
El Poder Judicial, desesperado por una inminente reforma constitucional que los priva del manejo nepotista y corrupto de un Poder que consideran de su propiedad, se lanzan a un paro de actividades, por tiempo indefinido. Quieren que los otros dos Poderes de la Unión, se desistan en impulsar esa reforma y dejen las cosas tal como están, o a lo mucho, se conformen con dar una “manita de gato” a la vieja estructura que vende la Ley y la Justicia a su antojo.
Esta amenaza de huelga no va a doblar ni al Poder Legislativo, ni al presidente del país. Es una acción condenada al fracaso, porque para que una huelga prospere y un paro sea efectivo, se requiere necesariamente, respaldo social. Y si algo le falta a toda la oposición en tiempos de la Cuarta Transformación, es precisamente el apoyo de la gente. Pocos son los ciudadanos que ven a los jueces como los garantes de la justicia y la legalidad.
Quienes promueven este paro de actividades en tribunales y juzgados, saben que será muy difícil que el INE y el Tribunal Electoral, violen con flagrancia lo que señala nuestra constitución y demás leyes electorales, sobre el reparto de espacios plurinominales. Por eso amenazan, amedrentan, presionan e intentan coptar a consejeros y magistrados en ambas instancias. La intención es obligarlos a violar la Ley, utilizando cualquier medio al alcance.
Y si el reparto fuera constitucionalmente legal, al menos, desprestigiar internacionalmente a nuestra estructura democrática y al gobierno entrante.
La gobernadora de Chihuahua, manejando a una fiscalía anticorrupción paradójicamente corrupta, pretende manchar la toma de protesta de la doctora Claudia Sheinbaum y a los integrantes de su equipo cercano, intentando ejecutar una orden de aprehensión en contra del senador electo Javier Corral, en la Ciudad de México, donde carece de jurisdicción y competencia.
Esto se ejecuta un día antes del evento programado en las instalaciones del Tribunal Electoral, donde asistirá la hoy presidenta electa.
Se intenta desprestigiar a la próxima presidenta del país y para eso, se recurre a uno de los manipuladores de información más conocidos. Ciro Gómez Leyva, quien es avisado anticipadamente del operativo que pretende realizar la gente de la fiscalía de Chihuahua, para que la noticia se difunda a nivel nacional e internacional. El montaje fracasa, porque la Fiscalía de la Ciudad de México, no permite un operativo violatorio de la Ley.
Los papeles se invierten y hoy hay acusaciones formales en contra de todos los involucrados en un montaje donde se rebasa el marco legal. Y es entonces cuando vemos a un Ciro Gómez rabioso, al estar involucrado en una acción ilegal descubierta a los ojos del público.
Un Ciro que acusa, como buen facho, al gobierno mexicano de “persecución y acoso político”. Ciro literalmente llora cuando compara al México actual, con las “dictaduras” de Venezuela y Rusia, señalando que hoy es denunciado, simplemente por hacer el mismo trabajo que ha desarrollado durante décadas.
Esto es, mentir con total descaro. En uno de los momentos en que la rabia que expone ante su audiencia alcanza el límite y pierde la mesura, Ciro dice que se le persigue, porque “el gobierno tiene miedo de lo que se viene”. Y uno se pregunta ¿Qué se viene, Ciro? ¿Qué prepara la oposición en este momento? ¿Qué bajeza novedosa están por estrenar?
Porque la oposición, al quedar reducida políticamente al cero absoluto en la pasada elección, ya no busca alternativas democráticas y políticas para mantenerse a flote. Intenta disparar todo cañonazo de basura que pueda preparar durante los siguientes seis años.
Saturar de suciedad a México y a su gobierno. Dinero tienen para eso y más. Por lo mismo son esperados los ataques difamatorios, los montajes, las mentiras, las calumnias y el nado sincronizado que pretende manchar.
Lo indicado en estos casos, es preparar las palomitas y la bebida de nuestro gusto, para asistir a una nueva representación que nos ofrecen los integrantes de una clase social corrupta, desprestigiada e irrelevante.
No hacerles caso, para no engancharnos, o quedar atrapados en su telaraña. Porque eso es precisamente lo que buscan los grupos reaccionarios. Un malestar social que vaya creciendo a medida de que las mentiras hacen blanco en el grueso de la sociedad. Un estado de insatisfacción ante un gobierno que en realidad trabaja en favor del pueblo.
La oposición comienza a rascarle los testículos al Tigre. Lo quiere inconforme y alterado, en unos otro sentido. La violencia social opera en favor de ellos.
Esa apuesta es peligrosa. Cualquiera suelta al Tigre, pero Andrés Manuel López Obrador que lo tenía atendido, satisfecho y bien tratado, ya se va. Se jubila.
Y entre toda la oposición conocida ¿Quién tiene capacidad para amarrar de nuevo al tigre? ¿Quién tiene la capacidad y el coraje de AMLO? Nadie.
Cuando se presenta algún problema, por pequeño que éste sea, se tiran a llorar en público como Ciro Gómez Leyva, escondiendo la mano que arrojó la piedra.
Malthus Gamba
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