A pesar de los golpes bajos del señor “X”, la 4T sigue avanzando
En el box, los buenos exponentes se distinguen por su capacidad particular para enfrentar a cualquier oponente.
Algunos tienen una pegada sólida, tremenda, que no requiere de otro trabajo que el de hacer contacto directo en el rostro del rival. Otros, cuentan con un estilo más depurado, que les permite acumular puntos durante la contienda. Son peleadores técnicos, que dominan a plenitud la disciplina. Los hay también de un valor a toda prueba, donde no obstante sus limitaciones naturales o de formación en el arte boxístico, arremeten siempre en busca del triunfo.
El ataque sobre el contrincante es importante en el boxeo. Pero una defensa adecuada, es el complemento indispensable para lograr méritos y triunfos ante los adversarios.
Han existido buenos peleadores que no han podido destacar, por no haber tenido la resistencia física suficiente, para asimilar el ataque del rival. Boxeadores con mandíbula de “cristal”, que caen vencidos cuando son conectados con solidez.
Si trasladamos este escenario a la vida política nacional, podemos ver que no es exagerado señalar que en este momento, el gobierno de la Cuarta Transformación, está resultando para sus contrincantes, un peleador excepcional, de esos que la historia produce en raras ocasiones.
A diario vemos ataques ininterrumpidos por parte de quienes integran la derecha reaccionaria.
Vemos cualquier noticiero televisivo, o escuchamos alguno en radio y nos damos cuenta de que la campaña en contra de López Obrador, es incesante. Todos los comentaristas le encuentran defectos a las medidas de cambio impulsadas por el presidente.
Los errores son permanentes, se acumulan y no está lejano el día en que la crisis generalizada, haga presa del país.
Pero curiosamente ese día nunca llega. El país sigue adelante y los cambios impulsados por el gobierno, avanzan y se profundizan en todo el territorio nacional.
Como los boxeadores de buena hechura, la Cuarta Transformación tiene un poder de ataque y asimilación envidiables.
Ataque, porque sus iniciativas han hecho que en pocos meses, las clases más desprotegidas del país, comiencen a sentir en sus bolsillos, los resultados que les brindan los programas sociales programados.
Asimilación, porque no obstante el golpeteo permanente de la oposición conservadora, no pierde el ritmo, no cambia su estrategia y camina segura hacia el cambio. Han sido meses de ataques permanentes de la prensa opositora, de los políticos que añoran los tiempos de la corrupción y de los empresarios que los acompañan, ya que a final de cuentas, todos estaban en el mismo negocio.
En la conferencia mañanera de este día, el presidente se refirió a los amparos interpuestos por el grupo conservador que lidera Claudio X González Guajardo.
Recordó como en tiempos del salinismo, el padre de este empresario, fue incondicional del presidente en turno. De esa relación nacieron las alianzas económicas y políticas que hoy defiende el hijo.
Estos amparos son válidos, nos dice el presidente. Son garantías a disposición de todos los ciudadanos, que contempla el marco legal vigente en el país.
Por lo mismo, toca al Poder Judicial determinar en última instancia, lo que corresponde a derecho. La defensoría de la presidencia, así como el área jurídica de la Defensa Nacional, están trabajando para que el fallo del juez, sea favorable a los intereses de la nación.
Este es el golpe más fuerte que han podido conectar los grupos conservadores y no han conseguido debilitar en nada al gobierno.
Las campañas sucias, donde las noticias falsas se suceden unas a otras, tampoco consiguen mermar la fortaleza de quienes ejercen el poder en la actualidad, ni empañar en algo la imagen del presidente.
Han utilizado todo, para deteriorar la imagen presidencial. Desde la salud del primer mandatario, hasta el curso de verano de su hijo, pasando por los zapatos que usó su esposa en una ceremonia. Los gastos en longaniza en palacio nacional, el pago a periodistas de redes sociales para hacer preguntas a modo en las mañaneras, las supuestas pláticas del gobierno con grupos del crimen organizado, han sido otras noticias creadas y difundidas por quienes trabajan defendiendo los intereses de los reaccionario.
Al final, toda esa basura informativa queda desenmascarada y la Cuarta Transformación sigue adelante, sin mayor problema.
Los conservadores no tienen poder en su pegada.
Se mueven mucho, tiran golpes hacia todas partes, pero la mayoría de ellos no hacen blanco en el rival. Los pocos que encuentran destino, carecen siempre de la fuerza suficiente, como para causar daño.
Hoy el presidente reafirmó que la intención de este gobierno es una e inalterable. Se termina la corrupción, se acaban los privilegios de clase y se da inicio a una etapa de desarrollo. Las presiones que los conservadores pretendan ejercer sobre el gobierno, serán inútiles, pues la decisión está tomada y no se dará un paso atrás en cuanto a políticas públicas.
A veces es desesperante para los ciudadanos, ver cómo la gente que defiende los intereses de la derecha, crea tanta mentira con la intención de afectar al gobierno. Molesta notar la mala intención al difundir noticias carentes de sustento.
Pero al ver la tranquilidad con que el presidente toma las cosas, la seguridad que tiene en el proyecto de transformación que encabeza, vuelve nuevamente la confianza a quienes hemos decidido apoyar ese cambio.
Podrán golpear todo lo que gusten a la Cuarta Transformación y también a López Obrador.
Es, como dice el presidente, un derecho democrático de los opositores.
Lo que no podrán conseguir, es ablandar al actual gobierno, ni al titular del ejecutivo.
Las noticias falsas llegan y se van sin causar mayor daño y mientras la confianza de la gente se mantenga, no habrá poder reaccionario que consiga detener el cambio.
“Perdonen las molestias”, pero estamos construyendo un nuevo México.
Malthus Gamba