No permitamos las ‘tribus’ en MORENA; la 4T estaría en peligro
¿La 4T en peligro?
El próximo año habrá unas importantes elecciones en nuestro país que significarán la consolidación de la cuarta transformación, pero el Proyecto de Nación es seriamente amenazado por todos aquellos que se beneficiaban del antiguo régimen de prebendas y privilegios, quienes no repararán en utilizar la mentira y la manipulación para conseguir su objetivo de descarrilar los cambios logrados y someter o deponer a quien encabeza este movimiento, sin importarles un ápice que el poder se haya obtenido democráticamente y que tenga la mayor legitimidad en la historia.
Tenemos grupos neo fascistas de conservadores de ultra derecha como los de FRENAAA, liderados por un mesiánico y fuera de sí Gilberto Lozano, quienes quieren arrebatar por la fuerza una presidencia obtenida por abrumadora mayoría en las urnas, basados en una retórica que ni ellos mismos comprenden y con una arrogancia clasista y racista francamente insufrible. Con una torpeza increíble califican al presidente de “comunista”, sin entender mínimamente lo que éste concepto significa. Sin embargo este pequeño grupo que abreva del odio inducido por información falsa proveniente de mercenarios inescrupulosos enquistados en los medios de comunicación, son capaces de cualquier locura que provoque un enfrentamiento fraticida, a lo cual su apátrida líder invita abiertamente.
Desafortunadamente el ex presidente Felipe Calderón, temeroso de su futuro inmediato y hambriento de poder, abona a ese estado de ánimo social de unos cuantos mal informados o corruptos afectados por la transformación al llamar públicamente a una rebelión armada en un foro internacional. La irresponsabilidad y odio hacia los mexicanos de este personaje es inaudita y debe ser exhibida ampliamente, así como el hecho de que todos aquellos a quienes él asignó para el “combate al narcotráfico”, estaban coludidos con el crimen organizado y que, además derrochó el dinero del erario de una forma de la que no hay antecedente
Los gobiernos anteriores, de los que el pueblo ya no quiere saber más, pervirtieron el periodismo con generosas dádivas, convirtiendo a mediocres comunicadores en millonarios “líderes de opinión” que ahora se sienten indignados por un gobierno que canceló esos ofensivos pagos por sus “servicios”, y por ello personajes históricamente zalameros con el poder ahora se presentan como feroces críticos del mismo. Así vemos a López Dóriga, Rivapalacio o De Mauleón, y a irrelevantes como los Ferriz y los Krauze.
Pero hay otro grupo de periodistas que confunden su labor y queriendo parecer “críticos” e “imparciales” se van de bruces hasta el otro extremo, objetando nimiedades con análisis superficiales o dando voz a personas o grupos sólo por estar en contra del gobierno, sin investigar los casos a fondo. Y algunos van mas lejos aún, rodeándose de analistas charlatanes que sólo aportan información falsa y tergiversada.
Otra amenaza se encuentra dentro de la alianza Juntos Haremos Historia, donde encontramos diversos actores cuyas agendas se contraponen con el Proyecto de Nación. Están también los ingenuos que no comprenden el mandato de las urnas y que, temerosos de la crítica, pretenden conseguir un costoso consenso con otras fuerzas políticas. Y encontramos así mismo, quienes pretenden replicar una vida partidista que ha fracasado estrepitosamente en el pasado.
Atónitamente observamos a Mario Delgado y Ricardo Monreal negociar decisiones muy importantes, cediendo ante la minúscula oposición e ignorando la mayoría otorgada en las urnas y, peor aún, diputadas como Lorena Villavicencio que propone atomizar MORENA al fraccionarla en corrientes con la misma estrategia utilizada por “los chuchos” para desarticular y apropiarse del PRD, llevándolo después a su verdadera agenda derechista.
Estas y otras más son las amenazas reales y presentes contra la cuarta transformación y no debemos ignorarlas. Dejemos ya el ánimo triunfalista y el afán de minimizar al contrincante, pues éste no se detiene ante nada. Es tiempo de definiciones donde los tibios y timoratos no tienen cabida, preparémonos para una temporada de descarnada guerra híbrida determinada a realizar un golpe blando.
La paz no es la ausencia de guerra, sino la presencia de JUSTICIA