Reforma a las pensiones: después de 23 años; un poco de justicia para los trabajadores
En 1997 se modificó la Constitución para aprobar la Ley de Ahorro para el Retiro en la que se crean las Afores, se cancela el sistema de pensiones solidario, se individualizan las cuentas, se impulsa al sistema financiero en la economía de mercado, y se abandona al trabajador a su suerte para que reciba una pensión raquítica y miserable cuando se jubile.
El resultado de esa reforma fue que cada año aumentara el ahorro, que las Afores se llenaran de dinero, que cobraran comisiones de hasta 2.7% sobre el saldo que manejaban, y que solo invirtieran en bonos del gobierno que dan rendimientos bajos.
También sucedió, que cuando un trabajador al final de su vida laboral ganaba 7 mil pesos mensuales, tenía que haber trabajado durante 25 años en la economía formal, haber cumplido por lo menos 60 años de edad, y se retiraba ganando entre $1,540 y $2,100 pesos mensuales en promedio.
Como prácticamente todo lo que organizaron los gobiernos neoliberales, esta reforma fue también un rotundo fracaso para el desarrollo y el bienestar de la gente que debería haber beneficiado, y de cuyo esfuerzo solamente se aprovecharon unos cuantos. Tenemos un sistema de pensiones que no genera pensionados, sino desamparados.
A partir de entonces, los gobiernos neoliberales ignoraban el problema y lo dejaban pasar, a ver si el que seguía decidía intentar resolverlo.
Tuvieron que pasar 23 años, para que un gobierno con consciencia social, tomara el problema en sus manos, trabajara logrando que los empresarios y los trabajadores se pusieran de acuerdo, y así se lograra contar con una propuesta aprobada por todos, para comenzar a resolver este asunto de profunda injusticia, que han sufrido los trabajadores históricamente cuando se jubilan.
Una vez que la propuesta planteada por el gobierno federal se apruebe en el Congreso y se convierta en ley, los trabajadores sólo tendrán que trabajar 15 años en la economía formal, y no 25 para jubilarse a partir de que cumplan 60 años de edad.
Sin tener que aportar ni un centavo adicional a su fondo de retiro, van a recibir en promedio 40% más de lo que hubieran recibido antes, y los que ganan menos de 5 salarios mínimos, van a recibir 70% más de lo que cobrarían hoy al jubilarse.
Para que esto sea posible en el nuevo esquema de pensiones, los empresarios van a ir incrementando su aportación al fondo de retiro de los trabajadores, hasta en un 70% más de lo que aportan hoy, las Afores van a reducir sus comisiones a los niveles que cobran en otros países, y podrán invertir en activos que den más rendimiento al trabajador; y el gobierno federal aportará las pensiones para adultos mayores que hoy se garantizan por ley.
Con estas medidas un trabajador tendrá que trabajar sólo 15 años para jubilarse a los 60 años de edad. Además, si está ganando 7 mil pesos al mes, en lugar de cobrar solo $1,540 pesos mensuales después de retirarse, como pasa con la ley actual, con la nueva ley recibirá un poco más de los 7 mil pesos mensuales que recibía.
Ahora solo hay que esperar que los diputados y senadores de la oposición, no intenten sabotear esta propuesta, como lo intentaron con la que incluía las pensiones a adultos mayores, que se hizo ley a pesar de que todos ellos votaron en contra. Los vamos a estar vigilando de cerca.
Información importante ‼️ pic.twitter.com/gEfWCViMHl
— SinLínea.Mx (@SinLinea_Mx) July 23, 2020
Con esta nueva ley de pensiones, y la otra que otorga el derecho universal gratuito a la atención médica, el perfil de la seguridad social de México se transforma para garantizar que los jubilados tengan una vida digna, después de haber aportado su esfuerzo en beneficio de la sociedad.
Como lo dijo Angela Merkel, canciller de Alemania “Con la dignidad humana no se hacen concesiones”.