El PAN sale en defensa de lo indefendible: García Luna
La captura de Genaro García Luna en tierras norteamericanas, abre un enorme boquete en el frente conservador.
Es un golpe demoledor, que echa por tierra el discurso de “buen gobierno” que intentaban presentar los grupos reaccionarios. Sobre todo de quienes integran las filas del partido Acción Nacional.
Los políticos de nuestro país, han vivido momentos difíciles por acusaciones relacionadas con hechos de corrupción. Varios gobernadores han pisado la cárcel por este motivo. Funcionarios de niveles menores se cuentan por cientos.
Pero en el caso de García Luna se trata de un hecho nunca antes visto en nuestro país.
Un funcionario del más alto nivel, pisa la cárcel acusado de proteger a un cártel específico del crimen organizado. Y no solo eso. Se le acusa también de conspiración para cometer delitos relacionados con el narcotráfico, además de falsedad en su declaración de ingreso a la Unión Americana.
En lo personal, Genaro García deberá responder de estos delitos y de ser encontrado culpable, purgar la pena que se le imponga.
Pero en el aspecto político, esta situación deja al descubierto la forma en que gobernaron los presidentes panistas en tiempos de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Durante el sexenio foxista, García Luna estuvo a cargo de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI).
En el sexenio siguiente, luego del fraude electoral que permitió a Felipe Calderón llegar a la presidencia, García Luna fue nombrado Secretario de Seguridad Pública y desde ese puesto, creo a la denominada policía federal e instrumentó la estrategia de guerra contra el crimen organizado.
Esa forma violenta de enfrentar a la criminalidad, es el punto que sostiene a toda la construcción conservadora, en su permanente ataque a la Cuarta Transformación ya al presidente López Obrador.
La derecha mexicana, ha declarado una y mil veces, que esa radical manera de actuar, es la adecuada. Sostienen que el combate letal contra los grupos criminales, dio buenos resultados a los gobiernos panistas.
Derramar sangre en ese combate, era una circunstancia inevitable y fue por lo mismo que se dieron tantas situaciones donde la muerte de personal de las fuerzas armadas, policías y aún civiles inocentes, se convirtieron en hechos frecuentes.
La sociedad mexicana nunca estuvo de acuerdo con estos operativos de fuerza extrema, donde no se tomaban prisioneros y morían muchos inocentes. Pero otorgó el beneficio de la duda a la estrategia conservadora. Pudo darse el caso de que los gobiernos panistas no hayan encontrado otro medio para bajar los índices de criminalidad.
De manera un tanto forzada, el pueblo de México aceptó que la forma de gobernar en los sexenios de Fox y Calderón, quizá no fue la mejor en lo que corresponde a seguridad, pero que se guardaron un mínimo de formas, para actuar dentro del marco de la Ley.
¿Qué sucede ahora?
Que con la captura de Genaro García Luna y las acusaciones que pesan en su contra, se ve con claridad que la llamada “estrategia contra el crimen organizado”, jamás existió.
Genaro García, secretario de seguridad, recibía dinero del cártel de Sinaloa para actuar en beneficio de quienes integran esa organización y para atacar, usando a las instituciones de seguridad del país, a los otros grupos de la delincuencia organizada.
El secretario de seguridad pública era un empleado a sueldo de la criminalidad.
De acuerdo a la acusación que pesa en contra de García Luna en los Estados Unidos, este comportamiento delictivo, abarca los periodos presidenciales de Vicente Fox y Felipe Calderón.
¿Es creíble que ninguno de los dos expresidentes estuvieron enterados de las actividades criminales de de García Luna?
No se trataba, como hemos dicho, de un funcionario menor. Fue el responsable de la seguridad en todo el país.
El pulso que puede observarse en el ánimo de la sociedad en este momento, es de gran enojo.
A los ciudadanos se les engañó completamente, al decirles que había una estrategia de combate a la delincuencia.
En realidad, estos gobiernos panistas trabajaron en beneficio de una organización criminal.
Los miles de muertos que dejó la farsa, los puso el pueblo. Soldados, marinos, policías y ciudadanos comunes, murieron en enfrentamientos que tenían como finalidad, proteger a un grupo delincuencial en específico.
Y la gente tiene muy claro que esto sucedió durante los dos gobiernos panistas.
Hoy, es precisamente el PAN quien descalifica la forma pacífica que ha implementado la Cuarta Transformación para combatir el delito.
Atacar las causas y no combatir a muerte con los delincuentes, es el mecanismo con que se atiende el problema en el presente.
Los conservadores hablan a diario de la necesidad de regresar al modelo utilizado por Felipe Caderón y Genaro García en el pasado. Hablan de que la mano fuerte del Estado es el único camino para conseguir la paz en el país.
¿Esa estrategia que recomiendan con tanta vehemencia, contempla el pactar con un cártel del crimen, en específico?
Porque con los gobiernos panistas todo fue engaño. Simulación.
Hoy estamos conscientes de la realidad que se vivió en el país, durante los dos sexenios en que el panismo fue gobierno.
Decir que el problema que enfrenta García Luna en el presente, es una situación de carácter personal, es un engaño más.
Este episodio involucra a todo el régimen conservador. Nos muestra como son los políticos y gobernantes que proceden de las filas de Acción Nacional.
Nos enseña que el camino de la violencia, sirvió únicamente para enriquecer a determinados grupos políticos y de la delincuencia organizada.
Y al final, da testimonio de que las miles de vidas perdidas en esa falsa guerra contra el crimen, pudieron haberse evitado, si realmente hubiéramos tenido gobernantes honestos.
En ese entonces, la sociedad votó por verdaderos criminales, o por cómplices de la delincuencia.
Si al final, hay una sentencia en contra de Genaro García Luna, ésta debe extenderse en alguna forma a Felipe Calderón y a Vicente Fox.
En cuanto a Acción Nacional, es importante no olvidar que fue la plataforma política que impulsó a estos personajes, para que llegaran al poder.
No podemos olvidar que Genaro García Luna, también era militante panista.
Malthus Gamba