¿Estamos realmente ante una crisis económica?

En días recientes y a raíz de los resultados electorales del pasado dos de junio, se han presentado variaciones marginales en la cotización del dólar, así como en la Bolsa Mexicana de Valores, lo que ha desatado una ola de voces catastróficas, apocalípticas, que auguran un futuro económico fatal para México.

Y es que tanto políticos opositores, como comentaristas, periodistas e intelectuales contrarios a la actual administración, en su profunda soberbia, necesitan demostrar a 35 millones de mexicanos que votaron por la coalición Seguimos Haciendo Historia, que estamos equivocados y ellos, y solo ellos, tuvieron siempre la razón, aun cuando esto implique una catástrofe para el país.

Sin embargo, ése escenario fatalista solamente es aceptado por una minoría a la que fue inoculada un odio patológico  y están dispuestos a creer las teorías conspiranoides más absurdas, tales como un gigantesco fraude, planeado por años, perpetrado por un solo hombre (al que por cierto, consideran “inepto”)  y con la ayuda de ingenieros súper especialistas cubanos.

Pero, afortunadamente, la realidad es otra, pues en lo que respecta a la cotización peso-dólar, durante este gobierno, el peso ha tenido un fortalecimiento no visto en, al menos  años, con una recuperación de 8.8% durante el actual sexenio, pasando de 20.30 pesos por dólar al inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a 18.77 este miércoles 12 de junio, por lo que, aún con el reciente repunte favorable al dólar estadounidense, todavía se encuentra 1.53 pesos por debajo de la cotización al principio de la administración.

La variación presentada, además de ser marginal, correspondiente a poco más de un peso, desde el 2 de junio a la fecha, es una reacción normal en los mercados de divisas en todo el mundo, ante cualquier cambio de gobierno y se da, básicamente, por dos razones:

En primer lugar, los mercados internacionales siempre esperan a las primeras reacciones en temas económicos de quien ocupará la presidencia de un país, que en el caso de México fueron claras y contundentes, manteniendo a Rogelio Ramírez de la O como secretario de Hacienda, lo que mandó un mensaje de tranquilidad y continuidad de la política económica futura, coincidente con la aplicada por López Obrador y que ha permitido una inversión extranjera directa histórica, un fortalecimiento del mercado interno y que México sea el primer socio comercial de los Estados Unidos, solo por mencionar algunas.

Así mismo, la Doctora Claudia Sheinbaum se reunió, desde el lunes 3 de junio, con los directivos del Black Rock, el fondo de inversiones más grande del planeta, quienes tienen tanta confianza en la administración venidera, que prometieron multi millonarias inversiones en dólares para nuestro país.

De la misma forma, Audi, uno de los mayores fabricantes de automóviles de lujo en todo el mundo, decidió comprometer una inversión por más de mil millones de euros en el estado de Puebla.

Y finalmente, prácticamente todas las calificadoras ratificaron el grado de positivo para mediano y largo plazo, el riesgo-país, lo que significa que es completamente seguro invertir en México.

La segunda razón por la que se da una variación en la cotización del dólar en cada cambio de gobierno, es una razón más mezquina, porque los capitales, principalmente nacionales, aprovechan estos periodos para la especulación financiera, utilizando la natural cautela de los mercados de dinero para obtener inmorales ganancias.

Pero todas estas circunstancias están siendo aprovechadas por políticos de oposición, periodistas y comentaristas que ya no están siendo beneficiados por la “generosidad” del “apapacho” gubernamental, para intentar presionar al gobierno entrante, tomando como pretexto una supuesta inquietud de los mercados financieros por la posibilidad de que se apruebe la reforma al Poder Judicial, que tanto ha beneficiado a aquellos que impusieron a los actuales jueces, ministros y magistrados.

Así pues, la información que habla del inicio de una supuesta crisis económica, que reventará al inicio del sexenio de la Dra. Claudia Sheinbaum, no es otra cosa que un malabar de un puñado de oportunistas que pretenden presionar para que no se cumpla el contundente mandato del pueblo.