¿Quiénes son el #ComandanteBorolas y la “Sociedad Civil”?
Por @Fidel_el_de_acá
Felipe Del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa es el nombre del político mexicano nacido en Morelia, Michoacán y que fue presidente de México de 2006 a 2012 como resultado del primer fraude electoral cometido contra el pueblo de México y en particular contra el actual presidente Andrés Manuel López Obrador. Este fraude fue orquestado desde el gobierno encabezado por el expresidente Vicente Fox.
En esa elección de 2006, el INE dio el triunfo a Calderón con una diferencia de menos del 1% y este entregó el gobierno a Enrique Peña, quien sería el peor presidente de México y quien más daño ha causado a México con sus supuestas reformas estructurales, que lo único que hicieron fue saquear los bienes de la nación y entregarlas a intereses particulares realizando un tráfico de influencias que nos recordaron el Pacto de Carlos Salinas de Gortari y que en el sexenio de Peña se llamó Pacto por México. Esta entrega de bienes de la nación llego a tal punto que hoy exdirectores de Pemex, exsecretarios de Hacienda y Energía de los gobiernos de Salinas, Zedillo, Fox y Calderón, que trabajan para transnacionales y bancas de inversión en el sector energético, son dueños de plataformas petroleras.
La transición del poder del panista al priísta se hizo con el apoyo del Estado Mexicano y fue avalada por el INE dirigido por Luis Carlos Ugalde y por el tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con el firme propósito de impedir que el político tabasqueño llegara a la presidencia y así poder tapar todos los desfalcos cometidos por Fox y Calderón.
Este miedo a la verdad, nos condenó al peor desastre político en México, que ha sido el gobierno de Peña Nieto. Un gobierno lleno de banalidades, arrogancia, indolencia ante el dolor de casos tan graves como la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, las matanzas de Tlatlaya, Nochixtlán, entre otras; la infiltración del narcotráfico en el gobierno y la violencia en que se sumergió al país y que suma casi 300,000 muertes, 50,000 desaparecidos y más de medio millón de desplazados (según fuentes del gobierno oficiales al concluir el gobierno de Peña) durante los gobiernos de Calderón y Peña Nieto, así como la entrega de los bienes de la nación a intereses de particulares que se han aliado con los políticos para robarnos lo que por derecho nos corresponde a todos los mexicanos.
Calderón fue militante del Partido Acción Nacional (PAN) durante más de 30 años y renunció a este en Noviembre del 2018 después de la salida del PAN de su esposa Margarita Zavala ante la imposibilidad de que esta fuera candidata a las elecciones del 2018. Su ambición desmedida de poder se ha estrellado de frente contra la realidad al no poder realizar las asambleas que se requieren para que el INE le diera el registro de su intento de partido político llamado México Libre.
Dentro de los puestos públicos que ocupó Calderón destacan:
• Diputado por mayoría relativa de la Asamblea de Representantes de Noviembre de 1988 a Agosto de 1991. Tenía 26 años cuando inició su puesto, siendo este su única vez que ganó una elección previo a la presidencial de 2006
• Diputado Federal plurinominal de 1991 a 1994
• Diputado Federal plurinominal de 2000 a Febrero de 2003
• Director General de Banobras de Febrero de 2003 a Septiembre de 2003
• Secretario de Energía con Vicente Fox de Septiembre de 2003 a Junio de 2004
• Presidente de México de 2006 a 2012
La campaña por la presidencia de Calderón fue un madruguete a los planes del presidente Fox quien quería dejar en el puesto a su secretario de Gobernación Santiago Creel. El manejo que hizo Felipe Calderón del panismo (al cual conocía perfectamente ya que fue presidente del Comité Ejecutivo Nacional de Acción Nacional y posteriormente secretario general del partido) fue redituable para sus intereses personales ya que pudo contra la voluntad de un presidente mediocre como Fox quien durante su gobierno fue desplazado por la personalidad de Martha Sahagún que en ese entonces era llamada la Señora Presidenta y acariciaba la idea de suceder al político que presumía sus botas de charol y posaba en Roma como un enamorado de su flamante mujer frente al papa Juan Pablo II.
Calderón y el desmantelamiento de Pemex
No se puede entender la reforma energética de Peña sin la injerencia del gobierno de Felipe Calderón en materia energética. Las acciones conjuntas de los expresidentes dieron como resultado que muchos mexicanos ligados a la política ahora sean dueños de contratos de extracción de petróleo de la nación. Entre estos políticos destacan:
Jesús Reyes Heroles quien es presidente ejecutivo de StructurA, organización que agrupa a las empresas GEA Grupo de Economistas y Asociados, PROA, MBD y EnergeA, y miembro de diversos consejos de administración, así como de los consejos consultivos para América Latina del Deutsche Bank y del Energy Intelligence Group (EIG)
Pedro Aspe fue Secretario de Hacienda de Salinas, padrino de Luis Videgaray y fundó En 1996, Protego Asesores que en 2006 se fusionó con Evercore Partners. En 2009 Aspe fue nombrado presidente de su consejo de Administración y en 2012 Evercore adquirió el 20% de Diavaz DEP que firmó con Pemex el primer contrato de extracción del pozo Ebano-Panuco de Chicontepec en Veracruz. Al mismo tiempo, Evercore tiene participación accionaria en las empresas Davis Petroleum Corp, Velvet Energy LTD y TLP Energy. Aspe es también miembro del consejo de administración de Televisa.
Emilio Lozoya Austin, además de ser un prófugo de la justicia mexicana y haber sido Director de Pemex con Peña, fundó entre 2009 y 2012 varios fondos de inversión especializados en inversiones de capital privado a nivel global en diferentes industrias. Hasta agosto de 2012 fue miembro del consejo de administración de OHL junto a Jesús Reyes Heroles y Carlos Ruiz Sacristán, director de Pemex y posteriormente secretario de Comunicaciones y Transportes de Zedillo. En 2013 Ruiz Sacristán fue nombrado director general de Sempra Energy México, firma especializada en ductos de gas natural, distribución de gas, una planta de recibo de gas natural licuado, una planta de generación eléctrica y un importante proyecto de energía eólica en el norte de Baja California.
Juan José Suárez Coppel fue director de PEMEX de 2009 a 2012. No esperó ni un año de finalizar su gestión para ser reclutado por la empresa del sector energético Jacobs Engineering Group, a la que él mismo había otorgado un contrato. Esta empresa que tiene sede en Houston, Texas, obtuvo contratos con Pemex para construir 18 plataformas en el yacimiento Ku-Maloob-Zaap, por un monto de 2 mil 500 millones de dólares. Suarez Coppel fue responsable de grandes pérdidas para PEMEX al comprar irregularmente acciones de la española Repsol sin la autorización del consejo de administración de PEMEX representando una perdida para el erario de 10,000 millones de pesos durante el mandato de Calderón quien respaldo las acciones de Suarez junto a la secretaria de energía Georgina Kessel. Así mismo Suarez Copel creo una “tesorería paralela” de PEMEX mediante un complejo esquema financiero entre la paraestatal y la subsidiaria PM Holdings con sede en Amsterdam, Holanda.
Adrian Vargas Lajous, fue director de PEMEX con Zedillo. Lajous logró ser incluido en el consejo de ocho multinacionales, tan exitosas, que en conjunto lograron contratos por 73 mil millones de pesos con Pemex. Adrián Lajous también ha sido el principal asesor de energía de McKinsey, presidente de Petrometrica, consultora de energía, y director de Translation y Ternium, S.A., empresa dedicada a la producción y distribución de productos de acero. Es director de Schlumberger, empresa de servicios petroleros, suministro de tecnología y gestión de proyectos para la industria de aceite y el gas. Desde su salida del gobierno en 2000, Lajous se convirtió en consultor privado del banco Morgan Stanley que respaldó financiamientos para los negocios de la reforma energética. Lajous tiene denuncias por divulgar información estratégica para beneficiar a empresas privadas y extranjeras en licitaciones de contratos millonarios con Pemex. Apenas un mes después de finalizar su gestión en Pemex, Lajous fue contratado en Texas por la consultora McKinsey and Company, con sede en Houston. Trabajó ahí hasta septiembre de 2012. Dos meses antes de que Lajous dejara la compañía, Pemex Exploración y Producción le otorgó un contrato por adjudicación directa a McKinsey por 330.7 millones de pesos.
Todos estos nombres de mexicanos son beneficiarios directos del gobierno de Felipe Calderón. La responsabilidad que tiene Calderón es evidente y constituye un daño para todos los mexicanos ya que son miles de millones los que se han robado de la nación.
La guerra contra el narco como legitimización de una presidencia robada
Las elecciones de 2006 fueron violentadas desde la presidencia de Vicente Fox quien en recientes fechas aceptó que él hizo todo lo posible para que López Obrador no llegara a la presidencia. El cínico expresidente dice que él lo hizo “dentro de la Ley”. La estupidez de Fox raya en la locura al afirmar semejante barbaridad: ¿Cómo puede ser posible que el presidente de la nación en funciones, garante de la constitución y los procesos electorales se oponga a la voluntad popular y decir que eso está dentro de la Ley?
Previo a las elecciones de 2006 existieron casos emblemáticos de la injerencia de Vicente Fox en las elecciones de 2006 como lo fueron el desafuero de AMLO cuando era Jefe de Gobierno del DF y el pretexto para dicho desafuero fue violar una orden judicial que exigía la suspensión de la construcción de una calle en un terreno expropiado años atrás por gobiernos anteriores. De igual manera los video escándalos realizados por el empresario Carlos Ahumada en contubernio con Carlos Salinas, Vicente Fox y Diego Fernández de Ceballos al grabar en video a funcionarios ligados al tabasqueño y que fueron difundidos por televisa y Víctor Trujillo en una clara trampa a René Bejarano en las instalaciones de Televisa.
Además de esto, se desató una campaña de miedo contra la posibilidad de que AMLO llegara a la presidencia ya que este representaba un “peligro para México”.
Durante el proceso electoral de 2006, el INE le dio al triunfo a Calderón con el 0.54% de supuestas preferencias electorales sobre AMLO. La toma de protesta de Calderón duró solo 5 minutos donde solo recitó el juramento del cargo a presidente mientras legisladores del PRD gritaban en protesta por el fraude electoral para luego salir corriendo del Congreso de la Unión por el desmán que imperaba y que incluyó peleas entre legisladores.
Felipe Calderón se vio en la necesidad de legitimar su presidencia dando inicio a lo que llamó la guerra contra el narco, sumiéndonos en el mayor baño de sangre que ha habido en México en tiempos de paz. Y al decir paz, no puedo dejar de pensar en la violencia creciente y el estado de terror que vivimos durante su sexenio. La cobardía mostrada por este miserable personaje es ofensiva e insultante ya que no le importó masacrar a miles de mexicanos con tal de que se olvidara el fraude electoral. Se necesita ser un verdadero psicópata para anteponer su ambición de poder a la vida de miles de mexicanos a quienes recién había jurado proteger y cuidar.
Fue en ese escenario que en la mañana del 3 de enero de 2007, a un mes de haber tomado protesta cuando Calderón se vistió de militar en Apatzingán, Michoacán. Se presentó con un traje verde olivo, con el ceño fruncido, soberbio y aparentando un valor que nunca tuvo. Ataviado de esta manera ridícula, hizo una especie de desfile militar con la supuesta convicción que el “crimen organizado” (de ese entonces) debía combatirse con mano militar. Los resultados de la “guerra contra el narco” son más que evidentes: No se redujo en nada el narcotráfico, el narco corrompió el ejército, así como a funcionarios de su administración, al propio Calderón y sólo se combatió a grupos de narcotráfico de manera selectiva beneficiando a aquellos grupos que eran afines a su gobierno.
Enfundado en su camisola fuera de tono con las vestimentas de los generales que lo acompañaban, y que por la mala confección hacia juego con su cargo ilegítimo, Calderón quiso mostrar una figura de fuerza, entereza y decisión completamente alejado de la imagen ocurrente y desparpajada de su antecesor Vicente Fox. Ahora no sabría decidir cuál de los dos expresidentes desprestigió más la investidura presidencial o lo que esta debería representar. Así como esa camisola no le quedaba, el cargo de Presidente de México fue demasiado grande para un personaje tan limitado, antipatriota y ruin.
¿Qué necesidad tenía el presidente Calderón de vestirse como militar? Su sola presencia en el acto y su investidura ya lo validaba como el Jefe de las Fuerzas Armadas y comandante supremo, pero evidentemente su egocentrismo y narcisismo lo motivaron a mostrarse como el líder que no era. La falta de principios, ideales y motivaciones propios de un presidente de la Nación quiso suplirlas con una vestimenta de payaso que tomó la decisión de bañar de sangre al país. Ese hecho es un claro ejemplo de los esfuerzos que se hacen por llenar desde afuera o por encimita lo que no se lleva por dentro.
Resultados del gobierno de Calderón
Los resultados negativos que ahora vemos del gobierno de Calderón son muchos y podemos mencionar:
• Un país convertido en un cementerio con proporciones nunca antes vistas y escenas dantescas donde nos acostumbramos a una violencia inusitada que incluyó gente colgada en los puentes, personas decapitadas y desmembradas, así como el aumento enorme en el número de asesinatos
• El desmantelamiento de Pemex, CFE, y de las empresas productivas de México
• La desaparición de los excedentes petroleros cuando el precio del barril llego a $100 dólares por barril
• La legitimización del saqueo mediante las llamadas Organizaciones de la Sociedad Civil, con la creación de asociaciones civiles que recibieron millones de pesos del erario y que de paso difuminaron y atomizaron necesidades y reclamos auténticos de lucha contra la corrupción, la desigualdad, la protección de recursos naturales de la Nación, lucha contra el secuestro y otros rubros que pueden consultarse en la Ley Federal de Fomento a las Organizaciones de la Sociedad Civil y que empezó a acatarse desde el gobierno de Vicente Fox.
La ahora llamada Sociedad Civil
En los últimos años la sociedad mexicana ha sido privada de su representatividad legal y de sus reclamos por los que se conoce como la “Sociedad civil”.
Existe una privatización de los recursos públicos y la agenda pública por organismos que han actuado en contubernio con el gobierno ya que son manejadas por personas que se han beneficiado de recursos de erario que deberían ser destinados para el beneficio de todos los mexicanos. Legalmente son reconocidas como Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC).
Algunas de estas organizaciones reciben donativos de empresas ligadas a miembros de sus consejos consultivos y entre ellas destacan Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), México Evalúa, Transparencia Mexicana, México S.O.S., Únete y Ciudadanos por una Causa en Común.
El caso más emblemático es de MCCI encabezada por Claudio X González Guajardo y aunque se fundó en 2015, es la más conocida por el financiamiento que ha realizado a investigaciones periodísticas como la llamada “Estafa Maestra” y por promover los amparos contra las obras emblemáticas del gobierno actual. Carlos X González Guajardo es hijo de Claudio X González Laporte, quien fue asesor de Carlos Salinas y ambos se oponen al gobierno de AMLO con la intención de parar las obras de gran envergadura para que el gobierno actual no cumpla lo que ha prometido hacer. De acuerdo con un reporte del SAT de 2018, en 2017 MCCI recibió 73 millones de pesos, IMCO 40 millones, Únete 95 millones, Transparencia Mexicana recibió 8 millones, Causa en Común 5 millones y México S.O.S. 10 millones.
Según el INEGI, existen en México 66,000 Organizaciones de la Sociedad Civil, de las cuales 43,000 cuentan con una Clave Única de Inscripción (CLUNI) que ahora son proporcionadas por la Secretaría del Bienestar pero que en gobiernos anteriores los otorgaba la SEDESOL y aunque las ventanillas de proyectos eran abiertas al público en general, las reglas de operación, los tiempos para presentar proyectos y la calificación de estos proyectos era manipulada para solo beneficiar a políticos en funciones y a empresario ligados al régimen en turno.
El verdadero peligro para México
Recordando la frase de la campaña de desprestigio usada contra AMLO en 2006, ahora podemos afirmar sin temor a equivocarnos que el peligro real para México fue Felipe Calderón. Su ambición de fortuna y de poder lo empuja actualmente a querer ser parte activa de la oposición no sé si por el deseo real de volver a estar en el poder o pretenda usar su presencia o influencia como moneda de cambio para que evitar que le investigue por sus acciones durante su gobierno.
Así mismo son un peligro para México algunos grupos económicos que se oponen al cambio que estamos viviendo y por el cual votamos más de 30 millones de mexicanos. Esos grupos de inmenso poder económico son enemigos de los que queremos que se imponga la Justicia y la Paz en México.
El comentario del presidente Andrés Manuel López Obrador al comparar a Felipe Calderón con Borolas ha desatado miles de reacciones en las redes sociales. Ha sido el tema jocoso para muchos y de rechazo para otros. Felipe Calderón ha usado todo su poder económico y mediático para posicionarse como una oposición al gobierno. Ha pagado granjas de “bots” y a personajes supuestamente “influencers” para tener vigencia en la charla en redes. Todos estos esfuerzos, fueron tirados a la basura en 5 segundos con una sola frase del presidente que se ha dedicado a trabajar por el bien de los mexicanos y a luchar contra la corrupción y la desigualdad.
Los nuevos actores del debate público y quienes han ganado notoriedad por las OSC financiadas con recursos públicos, han hecho uso de nuestros impuestos para entorpecer el avance del gobierno de la #4T y son enemigos declarados de todos los que queremos un cambio y son también el peligro para México.
La molestia desatada en sectores del conservadurismo por el certero comentario del presidente que ridiculiza a Calderón no se ha hecho esperar. Los conservadores se olvidan lo que Felipe Calderón es. Se olvidan que él se robó la presidencia, que convirtió al país en un cementerio, que junto a su equipo de seguridad fabricó culpables, y que fue él quien empezó el desmantelamiento de PEMEX, CFE y el sector productivo del país entre tantos daños a la Nación.
Felipe Calderon, el que dijo “haiga sido como haiga sido” no tiene nada que ofrecer como político. Ya tuvo su oportunidad para trabajar en beneficio del país y sus resultados fueron catastróficos para la mayoría e irreversibles para miles de mexicanos asesinados durante su mandato. Miles de hogares destruidos, cientos de miles de huérfanos y jóvenes condenados a engrosar las filas del narcotráfico son su responsabilidad. Felipe Calderón no puede dar algo que no tiene. No hay nada más improductivo que esperar algo de una persona que no puede dar o que no está dispuesto a dar.
No debemos olvidar quien es Felipe Calderón, que ahora será recordado por siempre como #ComandanteBorolas. La frase del presidente López Obrador sólo es un calificativo jocoso y burlón que no corresponde con los crímenes que ha hecho este individuo. En realidad, el presidente ha sido condescendiente en la descripción de Calderón.
No olvidemos ni perdamos de vista a quienes son los que ostentan el poder económico en México como Claudio X González y que no sólo se oponen al gobierno de la #4T. Personajes como estos, no solo están atacando al Gobierno. Atacan a un pueblo que se manifestó libremente en las urnas y no podrán tener éxito ya que la vida y la prosperidad de todos los mexicanos no puede ser sometida a los intereses de unos pocos como lo ha sido en el pasado.
Se equivocan quienes creen que pueden limitar el deseo y el derecho que tenemos los mexicanos de ocupar el puesto que nos ha sido robado como Nación por un grupo de personajes ambiciosos, carentes de patriotismo, pundonor y empatía. Tenemos la firme intención de reconstruir este país que tanto amamos para beneficio de nuestros hijos y las futuras generaciones.
Sin duda que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador seguirá dando frutos y seguirá contando con el apoyo de la mayoría de mexicanos.
A pocos días del primer informe de gobierno, es un orgullo repetir esa frase que está grabada en muchos de nuestros corazones: Es un honor estar con Obrador!